Reino Unido informa de su primer fallecido por la nueva variante ómicron

Al menos una persona ha fallecido por la nueva variante ómicron en el Reino Unido.

El primer ministro británico Boris Johnson ha aprovechado esta información para volver a advertir contra la creencia que la nueva cepa es menos mortal que las anteriores.

«Se ha confirmado que al menos un paciente ha muerto con ómicron, así que creo que la idea de que esto es de alguna manera una versión más suave del virus es algo que tenemos que dejar a un lado», afirmó durante una visita a un centro de vacunación.

Riesgo de 75.000 muertes

Riesgo de hasta 75.000 muertes por la variante ómicron si no se adoptan restricciones más duras en el Reino Unido. Un estudio elaborado por la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres –que no habría sido revisado aún por expertos independientes– sugiere que esta nueva ola del coronavirus traerá más casos y hospitalizaciones que en enero de este año.

De hecho, el trabajo difundido el pasado sábado predice en el país anglosajón unas 25.000 muertes en el escenario más optimista y unas 75.000 en el más pesimista en el caso de que el Gobierno británico no adopte medidas más contundentes.

Reino Unido ha vuelto a recurrir al uso de la mascarilla en los interiores y recomendado a las empresas el teletrabajo. 

Récord de casos

Debido al aumento de hospitalizaciones causadas por  esta mutación sudafricana, Johnson se veía obligado a anunciar el domingo 12 de diciembre el lanzamiento de una campaña de emergencia que busca acelerar la vacunación de refuerzo para todos los mayores de 18 años, prevista para dentro de un mes.

Y es que esta situación ha llevado a que el sistema nacional de salud británico sufra más presión. La rápida propagación de esta cepa ha provocado que el Gobierno eleve a nivel 4 (de una escala de 5) la alerta por la pandemia. Solo este domingo se ha registrado un récord de 1.200 nuevos casos de la variante.