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Fósil del Arthropleura descubierto en 2018

Fósil del Arthropleura descubierto en 2018 en una playa de InglaterraUniversidad de Cambridge

Ciencia

El mayor milpiés de la historia llegó a pesar 50 kilos

Un grupo de científicos descubrió en 2018 el fósil del ejemplar más grande hallado hasta la fecha, que será expuesto al público en 2022

Un paseo fortuito en una recóndita playa del noreste de Inglaterra terminó con el hallazgo del fósil del milpiés más grande descubierto hasta la fecha, que vivió hace 326 millones de años, pesó cerca de 50 kilos y contó con una longitud de unos 2,7 metros de largo y 55 de ancho, según cálculos de los científicos.

En 2018, un antiguo estudiante de la Universidad de Cambridge caminaba por la playa de Howick, en el condado de Northumberland, cuando un segmento de 75 centímetros desprendido de un acantilado cercano captó de inmediato su atención. Tras dar el aviso y ser estudiado por expertos de su antigua universidad, el equipo concluyó que se trataba de un ejemplar de Arthropleura, una especie de milpiés gigante que ha sido también descubierta en otros dos fósiles en Alemania, aunque de un tamaño mucho menor. 

«Fue una completa casualidad», ha apuntado el doctor Neil Davies, del Departamento de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Cambridge y encargado de realizar la investigación, en referencia a la manera en que se produjo el hallazgo. «Por la forma en que cayó, la roca se abrió y expuso perfectamente el fósil, que uno de nuestros antiguos estudiantes de doctorado vio», explica en un reciente estudio sobre el hallazgo publicado en la revista Journal of the Geological Society.

Ejemplar pequeño de Arthropleura

Ejemplar pequeño de ArthropleuraNobu Tamura

Una vez realizada la investigación, el equipo concluyó que los restos pertenecen al período del Carbonífero, que tuvo lugar unos 100 millones de años antes de la llegada de los dinosaurios. En aquella época, Gran Bretaña se encontraba más cerca del ecuador, era abundante en selvas y gozaba de temperaturas más cálidas. Este período, sin embargo, dio paso al Pérmico, más seco y que produjo un descenso de los niveles de oxígeno en la atmósfera, lo que posiblemente abocó a la extinción de los artrópodos gigantes como este.

Otro de los asuntos que despertó la curiosidad de los investigadores fue el enorme tamaño del fósil (que se cree que no pertenece al animal, sino a un exoesqueleto del que se desprendió al crecer) y el modo en que llegó a conseguir esas proporciones. En este sentido, los expertos creen que el invertebrado basaba su alimentación en frutos secos, semillas, criaturas pequeñas y anfibios.

Aunque no han encontrado rastros de la cabeza (que podía revelar, por ejemplo, si contaba con grandes fauces, como algunos piensan), sí que han sabido identificar el número de patas. Y no, no eran 1.000, sino un rango que creen que oscila entre 32 y 64.

Cuatro años después del descubrimiento, los restos serán expuestos a partir de 2022 en el Museo Sedgwick de Cambridge, para entusiasmo de curiosos y académicos.

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