La compañía aeroespacial de Elon Musk perderá 40 satélites tras enviarlos hace solo unos días

SpaceX, la compañía espacial de Elon Musk, ha anunciado que la mayor parte de sus nuevos satélites Starlink que fueron puestos en órbita hace pocos días serán destruidos debido a una tormenta geomagnética.

«Desafortunadamente, los satélites desplegados el jueves se vieron significativamente afectados por una tormenta geomagnética este viernes. Estas tormentas hacen que la atmósfera se caliente y que aumente la densidad atmosférica en nuestras bajas altitudes de despliegue. De hecho, el GPS de a bordo sugiere que el recrudecimiento de la velocidad y la severidad de la tormenta hicieron que la resistencia atmosférica aumentara hasta un 50 % más que durante los lanzamientos anteriores», explica la compañía a través de un comunicado.

La empresa de fabricación aeroespacial detalla que el equipo ordenó a los satélites que «entraran en un modo seguro para que volasen de canto (como si se tratase de una hoja de papel) con el fin de minimizar la resistencia aerodinámica y protegerse así de la tormenta de manera efectiva». Por ello, señalan que «el análisis preliminar muestra que el aumento de la resistencia aerodinámica a esas bajas altitudes impidió que los satélites abandonaran el modo seguro para comenzar con las maniobras de elevación hacia la órbita, por lo que hasta 40 de los satélites volverán a entrar (o ya lo han hecho) en la atmósfera terrestre».

Pese a este revés, SpaceX recalca que los satélites no supondrán ningún peligro para la Tierra al regresar a la atmósfera ni ninguna amenaza para otros satélites, por lo que será necesario preocuparse por la basura espacial. Hasta la fecha, la compañía ha puesto en órbita más de 2.000 satélites, aunque su intención es llegar a los 4.400.