Otro foco de gripe aviar junto a la granja de Íscar donde se sacrificaron 133.000 gallinas
Detectado el primer caso de gripe aviar en la Comunidad de Madrid
Los Servicios Veterinarios de la Junta de Castilla y León han declarado un nuevo foco de gripe aviar en una explotación de gallinas en Íscar (Valladolid).
Nueve días después del primer brote, que obligó al sacrificio de más de 130.000 aves, se ha identificado una segunda granja dedicada a la producción de huevos afectada por el brote, a unos 500 metros del brote inicial.
Las autoridades de la Junta no han dudado en recordar que, pese a su alta transmisión entre animales, este virus tiene muy poca capacidad de contagio a seres humanos. No se propaga a través de productos como los huevos o la carne cocinada, han repetido en un comunicado, si bien recomiendan minimizar el contacto innecesario con aves que muestren síntomas clínicos o se hallen muertas en el campo.
Detectado el primer caso en Madrid
La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura detectó el pasado jueves el primer caso de gripe aviar de la región de la Comunidad de Madrid, concretamente en un ave silvestre migratoria (ánade friso) muerta.
Se trata de una variante con baja capacidad de transmisión a seres humanos y el ejemplar ha sido recogido por los agentes forestales en el embalse de Pedrezuela, en el municipio de Guadalix de la Sierra, indica la Comunidad de Madrid en un comunicado.
Tras el análisis realizado en el Laboratorio Regional de Sanidad Animal conforme a métodos de muestreo y evaluación de resultados, y con la confirmación del Laboratorio Central de Veterinaria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), se ha determinado que la enfermedad causante del fallecimiento del ejemplar es la conocida como influenza aviar altamente patógena (IAAP) subtipo H5, detalla la nota.
Pese a su escasa capacidad de contagio, la Dirección General de Agricultura, Ganadería y Alimentación va a reforzar la bioseguridad y la vigilancia en las explotaciones avícolas, con medidas que serán aprobadas por una próxima resolución de la Consejería y que se mantendrán hasta el próximo 30 de abril, de forma que se identifique lo antes posible cualquier sospecha relacionada con este virus.