Sumisión química Las autoridades, desconcertadas por los pinchazos 'sin rastro' a mujeres en discotecas
Ninguna de las pruebas realizadas hasta ahora a víctimas de este tipo de agresiones han dado positivo en sustancia química alguna
Es la última incógnita que trae de cabeza a los investigadores. ¿Qué hay detrás de la oleada de pinchazos a mujeres en discotecas españolas? Autoridades de un número cada vez más alto de comunidades autónomas (entre las que destacan Cataluña y el País Vasco, con 17 y 12 casos respectivamente) tratan de esclarecer las circunstancias de un fenómeno que, desde hace alrededor de dos semanas, registra nuevas agresiones cada pocos días. Pero es el hecho de que las víctimas no hayan sufrido delitos sexuales y que no se haya encontrado rastro de ningún tipo de sustancia química lo que desconcierta a los expertos.
El modus operandi no varía. Las mujeres notan un pinchazo, generalmente en la pierna o en el brazo, mientras disfrutan de una salida nocturna en entornos como una discoteca o un festival. Al poco tiempo comienzan a sentir indisposición, mareos y somnolencia –e incluso algún caso de desmayo–, por lo que acuden al hospital para ponerse en manos de los médicos. Y es entonces cuando surge el misterio: las analíticas no detectan ningún tipo de droga en la sangre; una circunstancia que puede deberse a que los pinchazos no inyectan nada o a que la sustancia desaparece al poco tiempo de entrar en el organismo.
Síntomas de los pinchazos
- Picor en la zona del pinchazo
- Somnolencia
- Mareos
- Vómitos o náuseas
- Pérdida de sentidos como la vista o el olfato
- Desorientación
Es por eso que las autoridades, que piden denunciar siempre las agresiones, no se atreven todavía a afirmar con seguridad si el propósito es abusar de las chicas (todo apunta a que sí) o si se trata de una simple (y delictiva, en cualquier caso) moda nocturna. «Se está investigando a los autores y vamos a ver cuál es el resultado de la investigación, porque parece que no tiene como finalidad o motivación la comisión de un delito contra la libertad sexual o de otro tipo», precisó este lunes en una entrevista radiofónica Beatriz Arlotazabal, consejera de Justicia, Igualdad y Políticas Sociales del Gobierno vasco.
Los primeros casos tuvieron lugar en San Fermín a principios de julio, donde cuatro mujeres acudieron a Urgencias tras asegurar haber sufrido pinchazos de personas desconocidas, y desde entonces los casos se han replicado en al menos siete comunidades, llegando incluso a ser algunas de las mujeres afectadas menores de edad. El método procede de Francia, donde la pasada primavera se registraron hasta 300 denuncias por casos similares.
Prevención
Por su parte, algunas ciudades y regiones tratan de tomar cartas en el asunto por distintas vías. Cataluña, por ejemplo, ha elaborado un protocolo específico de actuación y no descarta obligar a las discotecas a realizar registros antes de permitir el acceso a su interior. Otros Ayuntamientos, como el de Alicante, han puesto en marcha campañas de sensibilización y prevención de la 'Violencia sexual por sumisión química' con los objetivos de identificar situaciones potenciales de estas características y conocer sus síntomas con fines preventivos.
En los últimos tres años, el Ministerio del Interior ha notificado un total de 162 infracciones penales por agresiones sexuales en España.