Acceso de la fábrica Bilthoven Biologicals, en Utrecht
Sanidad
Países Bajos informa de un caso de polio por una fuga en una fábrica de vacunas
La cepa en cuestión es la poliomielitis tipo 3, que fue detectada por última vez en Nigeria y que la OMS declaró erradicada en octubre de 2019
Las autoridades neerlandesas han emitido una alarma sanitaria después de que un trabajador de una planta de producción de vacunas de la ciudad de Utrecht haya resultado infectado por el virus de la poliomielitis, declarado erradicado en casi todas sus formas desde hace años.
El contagiado es un empleado de la empresa Bilthoven Biologicals, propiedad del Instituto de Suero de India. La biotecnológica se dedica a la fabricación de combinados inactivados contra la enfermedad mediante el empleo de poliovirus que mueren en el proceso de producción. Se desconoce el momento o la forma en la que el hombre, que pasó la infección de manera asintomática al estar vacunado contra la enfermedad, se contagió.
La cepa en cuestión es la poliomielitis tipo 3, que fue detectada por última vez en Nigeria y que la OMS declaró erradicada en octubre de 2019. El contagiado no desarrolló la enfermedad, pero eliminó poliovirus infecciosos en sus heces durante semanas, lo cual supone un riesgo para el resto de la población. En la zona en la que vive el trabajador, la tasa de vacunación contra la enfermedad es inferior al 90 %.
Tras detectar la irregularidad, el individuo accedió a pasar un período de cuarentena de 33 días (del 8 de diciembre al 11 de enero) en una residencia especial facilitada por la empresa. El caso fue revelado el pasado jueves en la revista Eurosurveillance, publicada por el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades.
El contagio fue notificado cuando el protocolo de vigilancia de las aguas residuales de la fábrica detectó el virus en una muestra recolectada el pasado 15 de noviembre. «Este evento muestra que los incidentes que conducen a una ruptura de la contención e incluso a una infección pueden pasar desapercibidos y no informarse si no se realiza un monitoreo de rutina», escriben los autores del informe. «Creemos que nuestra estrategia de vigilancia ambiental ha demostrado ser muy valiosa y proponemos firmemente que otros países implementen un sistema similar».
Los virus encontrados en las aguas residuales de Bilthoven tenían mutaciones que indicaban que habían sido eliminados por una persona infectada y no se habían liberado en las aguas residuales por accidente, como sucedió en una planta de producción de vacunas de GSK en Bélgica en 2014. En aquella ocasión, un error humano liberó en el medio ambiente 45 litros de una solución con virus vivo de la polio, si bien ninguna persona resultó infectada y las autoridades resolvieron que no había riesgo para la población.
Tras confirmarse el contagio del trabajador, 51 empleados fueron identificados por haber tenido acceso a los virus tipo 3, y a todos se les pidió que proporcionaran muestras de heces y sangre. Ninguno de ellos, sin embargo, dio positivo.
