Muere la anciana que 'resucitó' en su propio velatorio en Ecuador
Bella Montoya, de 76 años, permanecía ingresada en estado grave tras haber sufrido una catalepsia
Bella Montoya, la ecuatoriana de 76 años que fue erróneamente declarada muerta y recobró el sentido en su propio velatorio, ha terminado falleciendo en el Hospital Martín Icanza del municipio costero de Babahoyo, donde permanecía ingresada en estado grave tras ser haber sido atendida y trasladada por los servicios médicos.
Fuentes sanitarias han confirmado a la cadena de televisión Ecuavisa la eventual defunción de la anciana, a la que «ya le están practicando la autopsia» y cuyo caso ha propiciado una investigación para esclarecer lo que apunta a una posible negligencia médica.
El caso de Montoya se remonta al pasado 9 de junio, cuando, tras haber sufrido una parada cardiorrespiratoria, los facultativos certificaron su muerte. Horas después, mientras sus familiares y allegados la velaban, se dieron cuenta de que todavía respiraba, razón por la que, aunque muy débil, pudo ser auxiliada e ingresada en la UCI.
De esta forma, tras realizarle las pruebas pertinentes, el personal médico confirmó que lo que realmente había sufrido la mujer había sido una catalepsia, un «accidente nervioso repentino, de índole histérica, que suspende las sensaciones e inmoviliza el cuerpo en cualquier postura en que se le coloque», según define la RAE.
Aunque las causas de la catalepsia siguen siendo objeto de estudio, lo cierto es que al reducir al mínimo las coordenadas vitales no es difícil confundirla con un fallecimiento. Para distinguirla, es necesario realizar un electrocardiograma.
No es, por tanto, la primera vez (ni será la última) que un caso así se malinterpreta y da lugar a este tipo de tristes confusiones en las que el falso fallecido despierta en el último momento, como ocurrió con un preso en Asturias en 2018 que iba de camino a la morgue o con un hombre en Sudáfrica en 2011 cuando ya estaba en el depósito de cadáveres.