¿Qué es una «implosión catastrófica» y cómo se originó en el Titan?
La presión externa del océano era superior a la que existía dentro del sumergible, provocando el terrible desenlace
La búsqueda del Titan acababa de la peor forma posible. La Guardia Costera estadounidense daba por muertos a los cinco tripulantes del sumergible por una «implosión catastrófica».
El domingo, casi dos horas después de la inmersión, el Titan dejó de emitir señales y se perdió toda comunicación. A partir de ese momento comenzó la búsqueda y rescate del sumergible, con la esperanza de encontrarlo antes de que se acabara el oxígeno.
Sin embargo, los ocupantes no fallecieron por asfixia. La Guardia Costera de EE.UU. anunciaba que se habían encontrado restos del sumergible a unos 3.300 metros de profundidad, cerca del área en la que está situado el icónico trasatlántico. Finalmente, se daba por muertos a los cinco tripulantes por esta implosión.
¿En qué consiste?
Para entender las consecuencias de esta implosión, es vital entender la presión que ejerce el agua en las profundidades de los océanos. El Titanic se encontraba a 3.800 metros de profundidad. Concretamente, en esa posición la presión es 395 veces más intensa que la que hay en la superficie.
Steve Somlyody, científico investigador con 20 años de experiencia en diseño y operación de sumergibles, declaró en Fox News que debido a la presión que se tiene en las profundidades del mar, esto pudo haber provocado una implosión al instante. «La presión ahí abajo es de 4.000 metros, es bastante alta. Si tuvieran algún tipo de fuga, provocaría una implosión y sucedería en un instante, muy inmediatamente. Ni siquiera te darías cuenta qué ocurrió», afirmó.
Puede confundirse la implosión con explosión, pero es todo lo contrario. Para hacernos una idea, cuando la presión se acumula dentro de un espacio –por ejemplo cuando se infla un globo en exceso–, explota. En el caso de la implosión, el colapso tiene lugar hacia dentro. En resumidas cuentas, aunque se desconocen las causas que habría generado la implosión, ésta tuvo lugar debido debido a que la presión externa del océano era superior a la que existía dentro del sumergible, provocando el terrible desenlace.
¿Se pudo haber evitado?
Lo que está claro es que en los últimos años hubo algunas voces que expresaron su preocupación por el diseño del sumergible. A pesar de que el Titan fue diseñado por la NASA y compuesto por fibra de carbono y titanio, nunca fue certificado por una organización externa.
Ya en 2018, David Lochridge, director de operaciones marinas de OceanGate Expeditions, avisó a través de un informe de la necesidad de hacer más pruebas al sumergible. Aun así, muchos expertos alegan que la nave debería haber sido capaz de resistir la presión generada a esas profundidades.