Qué dice la ley sobre si se puede usar la piscina de la comunidad si eres propietario de una plaza de garaje

Son muchos los que sueña con pegarse un chapuzón en la piscina en estos días de calor. Para los afortunados que tengan una, sería un delito no utilizarla. Si eres uno de ellos, puede que al bajar a la piscina te hayas cruzado con algún 'vecino' que no te suena de nada. Este 'vecino' podría ser el dueño de una de las plazas de garaje de tu urbanización, que ha pensado que también tenía libre acceso a la piscina. Y es que, con la apertura de las piscinas surge la gran duda de todos los años, ¿puede el propietario de una plaza de garaje utilizar la piscina de la comunidad? Te lo contamos.

Es un asunto controvertido ya que se puede dar por supuesto que al pagar los gastos de comunidad, el propietario de una plaza de garaje tiene derecho a usar la piscina. Sin embargo, esto no es del todo así.

La sentencia del Tribunal Supremo ha formalizado que los propietarios de una plaza de garaje no pueden utilizar la piscina comunitaria. Pero existen ciertos matices.

La razón

La razón principal por la que un propietario de una plaza de garaje no puede utilizar la piscina es por que no la necesita. Es decir, como propietario de una plaza de garaje, se deben garantizar ciertos servicios mínimos. Por su parte, la comunidad debe encargarse de que todo en el garaje funcione de manera correcta (que todas las luces funcionen, que se abra bien la puerta, etc). Teniendo en cuenta lo anterior, para el buen funcionamiento de la plaza de garaje no sería necesaria una piscina.

Salvo que exista autorización en los estatutos, tolerancia en la comunidad o que los propietarios de las plazas contribuyan con su cuota a los gastos de mantenimiento de la piscina; estos tendrían el acceso prohibido a la piscina de la comunidad.