Cataluña permitirá llenar las piscinas privadas si las abren al resto de la población

Cataluña está ultimando los detalles de un decreto ley que permitirá llenar todas las piscinas públicas y privadas que se registren como refugios climáticos y, por lo tanto, se abran a la población. En este sentido, y según ha publicado El Periódico, la Generalitat autorizará que los ayuntamientos catalanes llenen las piscinas de los hoteles, comunidades de vecinos, clubes deportivos o campings con agua potable pese a la sequía. Eso sí, es probable que haya que pagar una entrada.

Tras las negociaciones con la Federación de Municipios de Cataluña (FMC) y la Asociación Catalana de Municipios (ACM), el decreto ley se firmará el próximo 16 de abril. Este modificará el Plan Especial de Sequía (PES) y facilitará, entre otras cosas, el límite del «consumo de agua de los turistas». Así, los municipios que incumplan durante tres meses consecutivos los umbrales máximos deberán hacer cumplir la normativa todos sus establecimientos dedicados el turismo.

El que más se ha alegrado de la noticia ha sido el Gremio de Hoteles de Barcelona, que ha celebrado que el Govern haya tenido en cuenta a los establecimientos como «posible solución y alternativa» para hacer frente a las altas temperaturas estivales, convirtiéndose en posibles refugios climáticos.

Al hilo, el gremio ha defendido la «fuerte implicación» que el sector hotelero tiene con su entorno, por lo que considera «sensato» este nuevo escenario. Asimismo, la entidad ha apuntado que, una vez más, el sector, se convierte en una «solución» para afrontar situaciones sociales críticas.

En este sentido, fuentes de la Consejería de Acción Climática han revelado a ACN que el decreto nace «con la voluntad de entendimiento» entre el Gobierno y los máximos representantes de municipios de todo el país con la finalidad de dotar a los gestores locales de «más herramientas para la gestión de la emergencia por sequía sin menguar su autonomía municipal».

Además, han explicado que las piscinas censadas como refugio climático podrán rellenarse «en las cantidades indispensables» para garantizar «la calidad sanitaria del agua», siempre que se apliquen «medidas de ahorro adicionales que compense el agua que se utilice»