Estados Unidos
Los vecinos de San Francisco demandan a la ciudad por permitir la prostitución callejera
Esta situación comenzó a suceder después de que en un barrio cercano se levantasen barreras para evitar este comercio ilegal
Los ciudadanos de San Francisco (Estados Unidos) no pueden más. Concretamente los residentes del vecindario Shotwell, en el Distrito de la Misión. Estos, hartos del comercio sexual que se produce diariamente, han denunciado a la ciudad alegando que los funcionarios se mantienen al margen de lo que ocurre a altas horas de la madrugada.
Según explica el diario The Times en un reportaje, las prostitutas y los clientes –conocidos como Johns– no paran de deambular durante toda la noche. Así, comentan en la denuncia presentada ya en el Tribunal Superior de San Francisco, que además de haber sido amenazados, están cansados de ver las calles y sus patios llenos de basura.
Miccionan en las calles, ponen múcica a todo volumen mientras encuentran una prostituta, consumen drogas y las dejan por el suelo... estas son algunas de las actuaciones que, según han redactado los perjudicados en el escrito, deben soportar los vecinos del barrio, quienes afirman que la policía, hartos de la situación, han dejado de barrer las zonas, permitiendo así esta actividad ilegal.
Esta polémica situación pone en peligro las elecciones a la alcaldía del próximo mes de noviembre, ya que los ciudadanos aseguran que el Gobierno de San Francisco «no ha respondido a esta crisis» y «no ha hecho cumplir sus leyes contra el tráfico sexual y la prostitución, así como otras leyes contra el desorden público».
Los residentes aseguran que el problema se trasladó a la calle Shotwell después de que los policías instalasen barreras en la calle Capp, una de las vías más cercanas. Cuando esto sucedió, las trabajadoras y sus clientes se vieron obligados a cambiar de sitio. «En lugar de resolver el problema, la ciudad simplemente trasladó la molestia a la calle Shotwell, entre las calles 19 y 21», afirma la demanda a la que ha accedido The Times.
En respuesta a esta demanda y para tratar de solventar esta trágica situación. El Gobierno de San Francisco ha anunciado esta semana que va a comenzar a mandar cartas con el destinatario «Querido John» a aquellas personas de la ciudad que podrían estar acudiendo en calidad de cliente al barrio. Además, han comunicado que también se colocarán barreras para detener el comercio ilegal.