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25 de septiembre de 2024

Mejillones

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Retiran mejillones provenientes de España por la presencia de bacteria E.Coli

La diarrea con sangre y el dolor abdominal son los síntomas más comunes de la infección por la cepa E. coli O157

El Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos de la Unión Europea (RASFF) ha emitido una alerta por la contaminación de mejillones procedentes de España debido a la presencia de la bacteria Escherichia coli (E. coli), considerada un riesgo serio de toxiinfección alimentaria. Ante esta situación, se ha recomendado no consumir estos mejillones.

La detección del patógeno se realizó durante un control en Italia, afectando a la variedad de mejillón Mytilus Galloprovincialis. Como medida preventiva, se ha ordenado la retirada completa del producto del mercado italiano, ya que los análisis revelaron que los niveles de la bacteria eran hasta 700 veces superiores al límite permitido.

El informe de RASFF no especifica qué marcas comerciales están afectadas por la alerta, lo que ha generado críticas de la organización de consumidores Facua, que argumenta que esta falta de información impide a los consumidores verificar si han adquirido o consumido los productos en cuestión.

La bacteria Escherichia coli (E. coli) suele estar presente en los intestinos de personas y animales sanos. Aunque la mayoría de las cepas son inofensivas, algunas pueden provocar desde leves síntomas hasta infecciones graves. Según la Clínica Mayo, una de las cepas más peligrosas es la O157, que produce una toxina capaz de dañar el intestino delgado, causando diarrea con sangre.

La diarrea con sangre y el dolor abdominal son los síntomas más comunes de la infección por la cepa E. coli O157. En general, las personas afectadas no presentan fiebre, o si la tienen, es muy leve. Sin embargo, los niños y los ancianos corren un mayor riesgo de desarrollar formas graves de la enfermedad.

La mayoría de las cepas de Escherichia coli son inofensivas o solo causan episodios breves de diarrea. No obstante, en algunos casos, la infección puede afectar los glóbulos rojos y los riñones, una complicación grave que ocurre en aproximadamente 1 de cada 50 personas. Esta situación puede ser potencialmente mortal si no se recibe atención hospitalaria adecuada. Cualquier persona que presente diarrea con sangre de manera repentina debe contactar a un médico o acudir a una consulta de inmediato.

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