Los médicos autónomos critican a las tres aseguradoras «de siempre» y urgen replantear el modelo Muface

El modelo del mutualismo administrativo, con Muface como máximo exponente, está en entredicho en las últimas semanas. Las aseguradoras piden un aumento de la prima del 40 %, mientras que el Gobierno, que inicialmente les planteó un 14 %, las ha aumentado este martes a un 17,1 % para intentar contentar a Adeslas, Asisa y DKV y evitar así que Muface decaiga o que se tenga que iniciar el proceso de realizar la concesión a otras aseguradoras.

Pero existen otros agentes en este conflicto: los médicos autónomos. Estos se quejan de que las aseguradoras les pagan un precio «ridículo» y amenazan que, de no subirse en uno o dos años un 100 % los baremos, se irán y dejarán de colaborar con ellas. Así de claro se muestra Ignacio Guerrero, presidente de Unipromel –la asociación española de médicos de ejercicio libre–, que además critica que el Gobierno adjudique este servicio a las tres aseguradoras «de siempre» sin concurso público.

«No entendemos por qué un gobierno limita la asistencia a sus propios funcionarios», expone Guerrero, que aprovecha para señalar a las empresas aseguradoras y acusarlas de abusar de los adjudicatarios contratados, es decir, los médicos autónomos. Por ello, propone que el Ministerio de Transformación Digital y Función Pública utilice esos 3.000 millones de euros que destina a las compañías para ofrecer un servicio directamente con los médicos y los hospitales, que son «los verdaderos prestadores del servicio sanitario».

Desde la Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE), recuerdan que «la tarifa más baja que se ofrece en un centro sanitario privado es la de Muface». A juicio de su presidente, Carlos Rus, el sistema actual se sostiene gracias al compromiso de los profesionales y centros, pese a una financiación «absolutamente insuficiente». Rus reitera que parece que se busca desmantelar el modelo, pero sin asumir directamente la responsabilidad. La propuesta de ASPE incluye un aumento en la prima acorde a lo que solicitan las aseguradoras, con al menos el 50 % de ese incremento destinado a los centros sanitarios.

Guerrero explica a El Debate que si se van las tres compañías, Muface tiene la obligación de sacar un nuevo concurso para que otras empresas se presenten. «La estructura sanitaria está aquí, no se ha movido: los hospitales y los médicos que atendemos a estos pacientes seguimos aquí, el problema es que el intermediario pide un aumento para dejar de tener pérdidas», recuerda Guerrero. «El Ministerio debería de pagar directamente a estos agentes sin necesidad de que haya una aseguradora de por medio», propone, en lo que él llama el modelo «Muface directo».

En caso de haber otro concurso, revela que Unipromel se presentará y que espera que los hospitales privados también lo hagan para terminar con la «asfixia» de las aseguradoras a profesionales y centros. El médico propone también aliviar el Sistema Nacional de Salud incentivando mediante la desgravación a los usuarios a que contraten un seguro privado complementario, de manera que se compense vía declaración de la renta.

Igualmente, apunta que España está incumpliendo una normativa europea, ya que la sanidad es universal y gratuita, pero «solo si vas a los centros públicos». Según el doctor, esta situación es única en Europa, puesto que en otros países los usuarios tienen libertad de elección y pueden acudir tanto a un centro público como privado sufragándolo el Estado.

El Gobierno aumenta la prima

El Consejo de Ministros aprobó este martes la licitación del concierto de Muface para el periodo 2025-2026, con un incremento en la prima del 17,12 %, superior al 14 % inicialmente propuesto a las aseguradoras, pero inferior al 40 % que pedían estas y al 24 % que había propuesto la propia dirección de Muface este pasado verano.

Con esto, el Ejecutivo trata de contentar a las intermediarias del servicio y evitar que se retiren del concierto, lo cual llevaría a la realización de un concurso o, por el contrario, a disolver el modelo. El presupuesto total será de 1.337 millones de euros en 2025 y 1.344 millones en 2026, lo que representa un aumento de casi 304 millones de euros en comparación con el concierto actual, que expira este año.

El principal sindicato de funcionarios, el CSIF, ve la subida planteada por el Gobierno como «insuficiente» y advierte de que convocará movilizaciones si se producen nuevos recortes, «sin descartar ninguna medida». «No vamos a dejar que el modelo de Muface muera por inanición», ha avisado el sindicato que dirige Miguel Borra.

Las asociaciones que representan a la sanidad privada (ASPE e IDIS) también consideran insuficiente esta subida y creen que «no cambiará sustancialmente las posturas», ya que «el coste de las prestaciones ya supera en un 107 % las primas pagadas», lo que deja escaso margen para cubrir los gastos fijos y remunerar a los centros sanitarios.