Fundado en 1910
Manos de un anciano con alzhéimer

Manos de un anciano con alzhéimerEFE

Europa aprueba lecanemab, el fármaco que ralentiza el alzhéimer

La EMA autoriza la comercialización a Leqembi tras comprobar que los beneficios por la ralentización de los síntomas de la enfermedad son mayores que los riesgos

La Agencia Europea del Medicamento (EMA) da marcha atrás y, tras rechazar la aprobación del fármaco Leqembi (lecanemab), aprueba finalmente su uso.

«Tras reexaminar su dictamen inicial, el Comité de Medicamentos Humanos de la EMA ha recomendado conceder una autorización de comercialización a Leqembi (lecanemab) para el tratamiento del deterioro cognitivo leve o la demencia leve debida a la enfermedad de Alzheimer en pacientes que tienen solo una o ninguna copia de ApoE4 , una determinada forma del gen de la proteína apolipoproteína E», explican en su página web.

Un nuevo estudio ha mostrado que los beneficios por la ralentización de los síntomas de la enfermedad son mayores que los riesgos. En julio de 2024, el Comité había emitido un dictamen negativo sobre el uso de Leqembi en una población más amplia de todos los pacientes con enfermedad de Alzheimer en fase inicial.

El lecanemab, comercializado como Leqembi, ha demostrado ralentizar la progresión de la enfermedad de Alzheimer en un 27 %, según los resultados de un ensayo clínico realizado con 1,700 pacientes en varios países, incluida España, durante un período de 18 meses.

Las dos compañías que desarrollaron Leqembi, la japonesa Eisai y la estadounidense Biogen, han presentado datos adicionales de un seguimiento de pacientes durante tres años. Estos datos muestran que la mejora cognitiva se mantiene con la continuación del tratamiento y que se sitúa en el umbral de la relevancia clínica. Además, las empresas informaron que no se han registrado nuevas muertes relacionadas con el uso del medicamento durante este periodo de seguimiento.

Con esta decisión, Europa se une a otros países que ya han aprobado el uso de Leqembi, como Estados Unidos, China, Japón, Israel, Corea del Sur y Emiratos Árabes Unidos. Reino Unido también ha autorizado su uso, pero el Servicio Nacional de Salud (NHS) no lo financiará, ya que considera que los beneficios del tratamiento son demasiado modestos en relación con su coste, que asciende a unos 24.000 euros al año por paciente.

comentarios
tracking