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María Blasco, directora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO)EP

Investigación

Las irregularidades que acorralan por corrupción a María Blasco, la directora del Centro contra el Cáncer

La directora del Centro, que lleva más de una década al frente de la institución, fue nombrada por el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero en 2011 y prácticamente desde esa fecha comenzaron las quejas

Durante esta semana, El Debate ha desvelado algunas de las irregularidades que acorralan por corrupción a María Blasco, directora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), que depende del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. Entre las más destacadas se encuentran el desvío de fondos para la compra de arte mientras los científicos piden más presupuesto para investigar el cáncer o el cobro de un sobresueldo ilegal en paralelo a su nómina. A continuación, vamos a repasar con detalle todos estos puntos.

Las primeras denuncias contra Blasco han surgido por parte de sus propios compañeros, que han sido los encargados de dar la voz de alarma. La directora del Centro, que lleva más de una década al frente de la institución, fue nombrada por el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero en 2011 y prácticamente desde esa fecha comenzaron las quejas. Abandono de las instalaciones, falta de material para poder llevar a cabo las investigaciones oncológicas o ausencia de fondos para poder contratar a personal especializado son algunos de los extremos que denuncian los trabajadores.

Desde hace cinco años, Blasco ha desviado más de un millón de euros para la compra de cuadros y esculturas. Según el CNIO, se trata de una iniciativa en la que se pretende ligar el cáncer con el arte para «poner en contacto a científicos con artistas de primera fila internacional para explorar territorios comunes». El Debate ha publicado que esta compra de arte fue amadrinada en un acto que se llevó a cabo en Barcelona en 2019 por Begoña Gómez, la mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que, en el acto de presentación, habló sobre «la transformación social competitiva que une el arte con el cáncer».

El personal del Centro también denuncia que Blasco está cobrando desde hace cinco años un sobresueldo ilegal de 30.000 euros. Es decir, en total se ha beneficiado de 150.000 euros que son paralelos a su salario de 230.000 euros al año, de los más altos de la administración pública. En medio de esta situación, este periódico también ha publicado que Blasco se compró dos casas al contado en La Coruña. Concretamente frente a la playa de Carnota, de las más grandes de Galicia. Blasco aparece en esta operación inmobiliaria junto a su pareja, Ruth Toledano, una activista que colabora con el Centro en materia de protección a los animales que son objeto de investigaciones científicas.

El Debate también ha publicado que Blasco incluyó en un programa de 2,4 millones de euros del Centro a la Fundación Franz Weber, donde colabora Toledano. Este periódico también ha desvelado los vínculos de Blasco con el PSOE. Desde hace varios años es patrona de la Fundación Alternativas, uno de los laboratorios de ideas de los socialistas.

El sindicato Manos Limpias presentó este jueves una denuncia contra Blasco por los delitos de malversación, estafa y apropiación indebida. Desde el sindicato que dirige Miguel Bernad se pide que se judicialice este caso porque «estamos ante un caso donde se ha usado donativos de particulares para que se investigue el cáncer para la compra de arte». También se solicita que se investigue el cobro del sobresueldo con el que Blasco ha aumentado su patrimonio.

¿Conoces algún hecho irregular que quieres que investigue y cuente El Debate? Escribe a investigacion@eldebate.com si tienes pistas o indicios que consideras relevantes. La verdad siempre merece ser contada.

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