
Envasado de aceite de oliva en Jaén
¿Por qué los olivareros pierden 270 millones a pesar de la buena campaña del aceite?
Los agricultores no entienden el bajo precio en origen dado el ritmo de comercialización
La situación es disparatada. Tras dos temporadas convulsas por la sequía, el buen clima del año pasado auguraba una recuperación del sector. Sin embargo, la alta comercialización del aceite de oliva y los precios en origen están provocando importantes pérdidas entre los agricultores.
Lo ocurrido en las campañas 22/ y 23/24 fueron inauditas, con una producción incapaz de satisfacer toda la demanda. Esto provocó un incremento de precios que dejó el litro de aceite por encima de los diez euros en algunos momentos del año. Para la 24/25, se esperaba un respiro gracias a las lluvias y el fin del verano relativamente templado.
Aunque la producción fue bastante buena, en comparación con los años anteriores, los agricultores hicieron un llamamiento a la tranquilidad ante la «hecatombe de precios» con caídas al inicio de la campaña del 25,6 %. Esto, unido al ritmo de comercialización del aceite, está provocado graves pérdidas al sector.
Según los datos de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA), desde que comenzó la campaña el pasado 1 de octubre, se han comercializado 773.597 toneladas sobre una producción de 1.406.912,8 toneladas. En marzo, la comercialización fue, incluyendo importaciones, de 135.000 toneladas a una media de 3,62 euros en todas las categorías, cuando debería costar dos euros más.«Los olivareros han dejado de percibir 270 millones de euros en el mes de marzo o, lo que es lo mismo, más de 8 millones diarios debido a la actual coyuntura de precios de ruina en origen», señala Jesús Cózar, secretario general de UPA Andalucía.
Según Cózar, «no existen razones objetivas que justifiquen esta tendencia bajista de los precios en origen» ya que la comercialización está superando a la producción. De continuar con el nivel de venta actual, nos iríamos a unas ventas totales de 1.450.000 toneladas, por encima de la producción. La lógica dice que, a este ritmo, el precio en origen debería aumentar, pero sigue muy bajo penalizando a los agricultores.
Marzo cierra con unas existencias totales de 996.466 toneladas, de las 773.596 están en manos de cooperativas y almazaras; 210.900 las tienen los envasadores, mientras que en el Patrimonio Comunal Olivarero hay 11.970 toneladas.