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El bolso de imitación subastado por MSCHF

El bolso de imitación subastado por MSCHFMSCHF

Vendido por 58.000 euros el bolso más pequeño del mundo: mide menos que un grano de sal

Se trata de una imitación de un modelo de Louis Vuitton creado por el colectivo MSCHF

Entre 1.000 y 6.000 euros. En la página web de Louis Vuitton, el apartado dedicado a bolsos ofrece ese rango de precios en función de las características del producto. Los hay grandes, pequeños; con asa, sin ella; de cremallera, abotonados… Baratijas, en cualquier caso, en comparación con uno que acaba de venderse en una casa de subastas.

Se trata, eso sí, de un modelo peculiar: pese a que lleva las letras de la firma francesa, no es ella la creadora ni tampoco ha autorizado el uso de la marca. Pero su característica más destacada estriba en su tamaño: es más pequeño que un grano de sal.

El ‘pelotazo’ lo ha dado el colectivo artístico MSCHF, con sede en Brooklyn (Nueva York), que ha despachado el bolso más pequeño del mundo (sus medidas son de 657x222x700 micrómetros) por la friolera de 63.750 dólares (uno 58.500 euros) tras haber iniciado la puja en 15.000.

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La ‘imitación’, de color verde, se fabricó mediante «un proceso estereolitográfico utilizado habitualmente para fabricar diminutas estructuras mecánicas biotecnológicas», según detalla el anuncio de la subasta. Por suerte, los vendedores tuvieron la bondad de incluir en el pack de venta un microscopio con pantalla digital integrada para poder verlo.

«A medida que un objeto, como un bolso, que una vez fue funcional, se va haciendo más y más pequeño, su estatus se hace más abstracto, hasta que es simplemente la imagen de una marca. Anteriores bolsos pequeños de cuero necesitaban de una mano para transportarlos. Se convirtieron en disfuncionales, inconvenientes para su portador. El Bolso Microscópico lleva este concepto a su lógica conclusión final. Un objeto práctico es reducido a joyería y todas sus funciones se han evaporado», reza la descripción del artículo, cuyo tamaño es una evidente crítica a la tendencia a reducir a límites improductivo las proporciones de los bolsos.

MSCHF no es nuevo en esto de burlarse a través de sus creaciones de diversos asuntos; esa es, de hecho, su razón de ser –MSCHF es una abreviatura de mischief, 'travesura', en inglés–. Entre algunas de sus 'obras' están una extensión de Google Chrome para ver Netflix y aparentar estar al mismo tiempo en una videoconferencia, una aplicación que te sugiere dónde invertir en función de tu horóscopo, unos helados con las caras de Zuckerberg, Bill Gates o Jeff Bezos o un chat que te empareja con otra persona en función de tu físico.

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