El ejército de robots humanoides que Elon Musk quiere que nos ayude en nuestras tareas y seamos sus amigos
Desde que encomendara a parte de su equipo de Tesla el diseño y fabricación de un robot humanoide que ayudara a las personas en la realización de sus tareas, Elon Musk ha seguido con la ilusión, exigencia y esperanza que le caracteriza el desarrollo de Optimus, del que el empresario asegura que «tiene el potencial de terminar siendo más significativo a la larga que el negocio de coches de Tesla».
Con su estatura promedio (1,73 metros); y peso ligero (47 kilos la versión más reciente), Musk y su equipo llevan desarrollando y mejorando Optimus desde 2021, cuando fue anunciado al público por primera vez.
Por el momento, según lo que muestra y cuenta el magnate sudafricano tanto en su cuenta de X como en distintas intervenciones, el robot puede caminar, transportar paquetes, doblar camisetas, regar las plantas e incluso colocar piezas, aunque con lentitud.
Sin embargo, su objetivo es convertirlo en un auténtico robot de ciencia ficción: uno que no solo sea capaz de llevar a cabo determinadas labores (con la consiguiente liberación que eso supondría para las personas), sino también ser un compañero, incluso un amigo, con el que sus propietarios puedan entablar una especie de relación afectiva.
Por lo que se sabe, Optimus cuenta con una batería eléctrica en el pecho que le proporciona energía de manera eficiente. Por su parte, su ‘cerebro’ consiste en una placa central que le sirve como inteligencia artificial y un sistema de navegación similar al que Tesla desarrolla para sus coches autónomos. Tiene visores y sensores incorporados, conectividad inalámbrica, capacidades de audio y puntos de transmisión de fuerza para poder transportar y sostener cosas, y también moverse.
En cuanto a su disponibilidad, Musk, que no ha fijado aún fecha de salida al mercado habida cuenta de que el robot se encuentra aún en pleno desarrollo, cree que el robot estará a la venta por menos de 20.000 euros, según avanzó en 2022.
Un precio, dice, que lo diferenciará de otros robots más avanzados, pero con más limitaciones en sus funciones y producción de unidades. El sudafricano, siempre ambicioso y maximalista con sus proyectos, aspira a crear un ejército de Optimus fabricados a gran escala. Por lo pronto, en su último vídeo del robot difundido en X ya se ven, además del robot que lo protagoniza, a muchos otros androides en distintos puestos de trabajo de la sala en la que tiene lugar la grabación. Musk espera que algún día esa sala pueda estar en cualquier lugar del mundo.