Cine
Meryl Streep: su mejor película en cada década
La ganadora del Premio Princesa de Asturias de las Artes es la actriz con más nominaciones en la historia de los Oscar
La actriz Meryl Streep ha sido galardonada este miércoles con el Premio Princesa de Asturias de las Artes por «dignificar el arte de la interpretación». Y tanto que lo dignifica. A sus 73 años, Meryl Streep ya ha brillado como actriz en seis décadas diferentes en las que ha acumulado 21 nominaciones a los Oscar. Más, bastantes más, que ningún otro intérprete en la historia de los Oscar. Los dos siguientes nombres en la lista, otros dos grandes como Katharine Hepburn y Jack Nicholson, tienen 12 nominaciones cada uno.
Meryl Streep ha ganado –hasta el momento– tres Oscar. El primero, como mejor actriz de reparto por Kramer contra Kramer (1979); el segundo, como mejor actriz por La decisión de Sophie (1982); y el tercero, también como mejor actriz, por La dama de hierro (2011). A pesar de esa notable diferencia con el resto de intérpretes en cuanto al número de nominaciones, Meryl Streep no es la actriz con más Oscar de la historia. Ese honor sigue correspondiendo a Katharine Hepburn, que logró cuatro. El tiempo dirá si Meryl Streep puede igualar o incluso superar ese récord.
De momento lo que dice el tiempo es que Meryl Streep ha dejado grandes interpretaciones y películas desde la última parte de los años 70 hasta ahora. Son ya seis las décadas en las que ha trabajado. En El Debate hemos elegido una película clave de sus cinco primeras décadas (en la actual solo ha participado en No mires atrás y Déjales hablar). Los títulos seleccionados no tienen por qué coincidir con las mejores de Meryl Streep, sobre todo porque hay décadas en las que es difícil quedarse con un único filme, pero sí comparten algo con la propia Meryl Streep: todas esas películas tienen algo especial.
Kramer contra Kramer (1979)
No tuvo que esperar mucho Meryl Streep para alcanzar el éxito como actriz. Julia (1977), de Fred Zinnemann, fue su primer trabajo importante. Al año siguiente participaría en El cazador (1978). Y otro año después, en Manhattan y en Kramer contra Kramer, además del filme Escalada al poder. El título de esta última cinta no podría ilustrar mejor lo que supuso aquel año 1979 en la carrera de Meryl Streep. Los años 70 es la década que acumula menos películas de la actriz, pero ni aun así la elección es sencilla. Nos quedamos con Kramer contra Kramer porque es la película por la que Meryl Streep ganó su primer Oscar (como mejor actriz de reparto) y porque su papel tiene más peso que en Manhattan, pero también podría ser El cazador (su primera nominación al Oscar).
Memorias de África (1985)
De los años 80 podríamos haber elegido La decisión de Sophie, que supuso el segundo Oscar para Meryl Streep y el primero en la categoría de mejor actriz. Pero no nos perdonaríamos dejar fuera una película tan emblemática como Memorias de África. El largometraje de Sidney Pollack se llevó siete Oscar pero entre ellos no estaba el de mejor actriz al que aspiraba Meryl Streep. Se lo quitó Geraldine Page por Regreso a Bountiful.
Los puentes de Madison (1995)
La década de los 90 es la que quizá menos discusión admite a la hora de elegir una película de Meryl Streep. Ese honor recae en la exquisita Los puentes de Madison, que extrañamente solo recibió una nominación al Oscar: la de Meryl Streep como mejor actriz por su interpretación de Francesca. La ganadora fue Susan Sarandon por Pena de muerte. Los puentes de Madison figura entre las mejores películas de Meryl Streep y también entre las mejores películas de Clint Eastwood. Y eso, tanto en un caso como en otro, es mucho. De Los puentes de Madison nos quedará, entre otras cosas, la prodigiosa escena del semáforo y la lluvia. Y, a Meryl Streep, también un detalle del rodaje. La actriz no olvida cómo en la secuencia en la que bailaba abrazada a Clint Eastwood percibió los sutiles gestos del actor y director para pedir que la cámara se moviese según sus indicaciones mientras bailaba con los ojos cerrados.
El diablo viste de Prada (2006)
De la primera década del siglo XXI nos quedamos con El diablo viste de Prada. El testimonio de John Krasinski, el director y protagonista de Un lugar tranquilo, ilustra por qué esta película es especial. John Krasinski admite que El diablo viste de Prada es de esas películas que uno se queda a ver cada vez que la emiten en televisión. Solo que en su caso esas veces son… ¡72! Seguro que en ello influye decisivamente el hecho de que una de las actrices de la película sea Emily Blunt, su pareja. Pero también el excelente trabajo de Meryl Streep como la arrogante Miranda Priestly.
La dama de hierro (2011)
En la década anterior, Meryl Streep acumuló hasta seis nominaciones a los Oscar, solo una menos que en su prodigiosa década de los 80. De esas seis candidaturas, la única que se convirtió en estatuilla correspondió a su extraordinaria interpretación de Margaret Thatcher en La dama de hierro.
Ese trabajo, que en un principio llegó a rechazar la actriz, es el que elegimos como representante de la década anterior en la admirable carrera de Meryl Streep.