Ni ´Seven´ ni ´El club de la lucha´: Brad Pitt sorprende al elegir su película favorita de su filmografía

Brad Pitt va camino de los 40 años en activo como actor en la siempre competida industria de Hollywood, en los que ha filmado cerca de 70 películas. Tiempo más que suficiente para hacer un balance y elegir aquella que más le ha marcado o a la que más cariño guarda. Lo fácil sería pensar que Brad Pitt se decantaría por una película como Seven o, tal vez, por El club de la lucha, pero el actor siempre tiene un as guardado bajo la manga para sorprender.

El filme escogido por Brad Pitt como la mejor película de su dilatada carrera es El asesinato de Jesse James por el cobarde Robert Ford (2007), dirigida por Andrew Dominik. Curiosamente, se trata de uno de los mayores –si no el mayor– fracasos comerciales de su carrera. Los costes de producción del filme ascendieron a 30 millones de dólares y el filme apenas logró recaudar poco más de 15 millones en taquilla a nivel internacional.

El propio Brad Pitt reflexionó en GQ Style sobre el batacazo que se dio el filme que, eso sí, se trata de una buena película: «Diría que la actuación sigue siendo más emocionante en materia de comedia, donde estás arriesgando. Puedo cosechar éxitos una y otra vez y simplemente... mi película favorita es la película con peor recaudación de todo lo que he hecho, El asesinato de Jesse James por el cobarde Robert Ford. Si creo que algo es digno, entonces sé que lo será en el futuro».

Lejos de avergonzarse, Brad Pitt siente fascinación por esta creación audiovisual en la que se cuenta la historia del famoso bandido del oeste americano Jesse James. La historia narra su relación con el joven Robert Ford con una estética oscura y compleja, y con una narrativa muy pulcra.

Mucho se ha escrito sobre este crimen. Robert Ford engañó a Jesse James con la excusa de dar un nuevo golpe. Para ello, acudió a su casa con la intención de matarlo y, aprovechando un momento en que este se encontraba desarmado –se cree que colgando un cuadro–, le disparó por la espalda, huyendo junto con su hermano Charlie. No obstante, sus planes de hacerse con un botín por acabar con él acabaron en agua de borrajas puesto que, de la recompensa prometida, sólo cobraron 500 dólares cada uno.

La casa donde fue asesinado Jesse James aún se conserva y los más morbosos pueden ver el agujero de bala. Sus restos mortales reposan en el cementerio de Mount Olivet, Kearney (Missouri).