Imagen de la serie infantil Octonautas
Televisión
Netflix retira una serie infantil pese a las quejas de los padres: «Mi hijo de 4 años ha perdido la cabeza»
«No puedo creer que Los Octonautas vaya a desaparecer de Netflix el miércoles. Nuestra familia quedará abandonada», ha llegado a lamentar un padre en las redes sociales
Estamos acostumbrados a que los padres pidan a sus hijos –a los pequeños y a los no tan pequeños– que vean menos televisión y, en general, que permanezcan menos tiempo delante del móvil, las tabletas electrónicas y cualquier otra pantalla. Esa batalla, en muchos casos, es diaria, tiene dos bandos muy claros y se resuelve frecuentemente por la vía diplomática: los padres negocian con los niños para, quizá, dejarles terminar un capítulo antes de apagar la televisión. Sin embargo, estos días asisten en Reino Unido a una nueva variante: son los padres quienes muestran su preocupación por el hecho de que sus hijos se vayan a quedar sin una de sus series favoritas.
Netflix va a eliminar este mismo miércoles de su catálogo en el Reino Unido la serie infantil Los Octonautas, que en España se puede ver a través de Amazon Prime Video y RTVE Play, además de Netflix. Algunos padres han decidido expresar su desolación –la que espera también a sus hijos–, en la red social X, antes Twitter. Y eso a pesar de que la serie va a seguir estando disponible en otras plataformas salvo, al parecer, el bloque del final de los capítulos.
«No puedo creer que Los Octonautas vaya a desaparecer de Netflix el miércoles. Nuestra familia quedará abandonada. Sí, sí, está en Amazon Prime y en BBC iPlayer, pero 'the creature reports' del final de los episodios no está, aparentemente», lamenta un usuario. Este otro también se muestra alarmista, y eso que ya ha preparado el terreno en casa para avisar a su hijo: «Netflix va a quitar Los Octonautas. Mi hijo de 4 años está perdiendo la cabeza».
Menos 'diplomático' se muestra este otro usuario que dice «odiar» a Netflix por su decisión. Más aún cuando no ha podido terminar la serie, como reconoce. De sus palabras se desprende que es él mismo, y no alguno de sus hijos, quien tiene ganas de llorar al no poder seguir viendo Los Octonautas. Es como si a los niños y a los padres nos quitaran la serie (no tan) infantil del momento: esa joya titulada Bluey. También nos entrarían ganas de llorar sin las hermanas Bluey y Bingo, y sin sus padres: Bandit y Chilli.
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