El 21 de julio de 2023 se estrenaron con gran éxito de taquilla Barbie y Oppenheimer
Cine
Las dos películas de 2024 que pueden repetir el milagro de Oppenheimer y Barbie en 2023
El estreno de los dos esperados filmes en Estados Unidos se producirá el mismo día, como ocurrió con el fenómeno 'Barbenheimer'
El 21 de julio de 2023 se estrenaron dos de las películas más taquilleras del siglo: Barbie (1.436 millones de dólares) y Oppenheimer (942 millones de dólares). La poderosa combinación dio lugar al popular término Barbenheimer. El término surgió en las redes sociales, a pesar o quizás por todos los contrastes: una muñeca cantarina color chuchería y un oscuro psicodrama sobre el padre de la bomba atómica.
La industria cinematográfica ha especulado acerca de si las producciones que todavía están por estrenar en este 2024 lograrán acercarse a las impresionantes cifras que Barbenheimer logró. Lo cierto es que la fecha del próximo estreno protagonizado por la cantante Ariana Grande, Wicked, ha sido adelantada en Estados Unidos, del 27 al 22 de noviembre, coincidiendo así con otro de los estrenos más aguardados, Gladiator II, que en España se estrenará el 15 de noviembre, una semana antes que en Estados Unidos.
Wicked es la primera parte de la adaptación cinematográfica del exitoso musical de Broadway con el mismo nombre, una variación del cuento de hadas estadounidense El mago de Oz. El elenco protagonista está formado por Ariana Grande, como la bruja buena Glinda, y por Cynthia Erivo, como la bruja de piel verde Elphaba. Una historia sobre una floreciente amistad más bien improbable en un mundo fantástico.
Gladiator II y Wicked se estrenarán en Estados Unidos el 22 de noviembre
Gladiator II es la secuela de la monumental película de culto del año 2000, con Paul Mescal en el papel del emperador Lucio. Barbenheimer demostró que el mundo no es tan sencillo como Hollywood ha retratado en numerosas ocasiones. Los éxitos taquilleros probaron al competir entre sí que cualquier género cinematográfico atrae a cualquier género biológico. Esperemos que tanto Wicked como Gladiator II también lo hagan.
Cabe la posibilidad de que el adelanto del estreno de Wicked no fuese debido al riesgo de no alcanzar las cifras de Gladiator II, sino que puede que la verdadera intención de la industria cinematográfica fuese recrear el impacto de Barbenheimer con un potencial y lógico Wickiator. Pero de todos modos, ¿se puede forzar este fenómeno? ¿Es posible recrear un fenómeno que debe su éxito a precisamente no haber sido creado por ejecutivos de marketing?
Los contrastes entre Wicked y Gladiator II ya son evidentes, y ambas producciones son esperadas entre nosotros con impacientes ganas. Las redes harán el resto. O no.
