MasterChef Celebrity 9
Eduardo Casanova monta un «altar» LGTBI en la cocina de María León en 'MasterChef Celebrity'
La actriz, junto a Topacio, fue eliminada del concurso culinario, mientras que Francis logró el pin de la inmunidad
Una vez más, MasterChef Celebrity volvió a ser foco de escarnio contra los cristianos. Y, de nuevo, con la figura de María León implicada. Aunque contó con la ayuda del actor Eduardo Casanova.
En la tercera entrega de la edición, la actriz sacó a relucir una estampa de su madre, bajo el título de santa, rodada de querubines y con elementos propios de la Virgen María —como la corona de 12 estrellas—. De nuevo, la concursante volvíat a enfrenar la prueba de eliminación. Casanova, invitado para la ocasión por el jurado, abrió su maleta para prepararle un «altar» para que le diera suerte.
A la imagen de su madre se le unió la de su compañero «santo Pocholo y su mochila». Unas velas rosas, una imagen de María León y Eduardo Casanova semidesnudos, una pequeña estatuilla de la reina Isabel II y un par de banderas LGTBI completaron el rincón de la cocina de la competidora. También quemó un poco de romero, para terminar con la superstición.
Sin embargo, de poco le sirvió tanta parafernalia. Una mala sopa de fideos taiwanesa fue la condena de la actriz, que fue eliminada del concurso culinario. Se le unió Topacio, que tuvo que replicar varios platos inspirados en la película Desayuno con diamantes.
Pelayo y su constante crítica a Marina Rivers
MasterChef avanza y se va intensificando. Con esta ya son dos las semanas en las que se ha expulsado a dos participantes. También afloran los egos y las disputas entre un grupo, a priori, muy unido. Pero hay uno que se está convirtiendo en el gran señalado por la audiencia: Pelayo. Sus incesantes críticas, casi siempre injustificadas contra Marina Rivers cansan al público.
En esta ocasión dejó perlas como: «pero qué películas vas a ver tú, si no sabes ni lo que es The shining —El resplandor— de Stanley Kubrick. Ponte una peli»; «cariño, ponte a cocinar y deja de quejarte. La niña esta… Ponte a hacer tiktoks» o aseguraba que «no está preocupado» por alguien que usaba una receta en una prueba. La acusaba de poner excusas en sus cocinados y de ser «monotema» por hablar demasiado de su generación —cuando denunciaba la dificultad para acceder a la vivienda de los jóvenes, por ejemplo—. Para evitar escuchar a la audiencia, incluso, ha limitado los comentarios en sus publicaciones de Instagram.
«Creo que Pelayo es un poco villano. Le gusta meter puntillitas, le gusta hacer comentarios fuera de lugar y me mira un poco por encima del hombro. Creo que por eso no funcionamos. No se le puede gustar a todo el mundo», reflexionaba la influencer.
Otra de las figuras que generó tensión fue Francis. En ningún momento había dado signos de enemistad con nadie, todo lo contrario. Sin embargo, tras ganarse el pin de la inmunidad aparecieron los enfrentamientos que, aparentemente, se solucionaron antes de subir a la galería con su delantal blanco.