¿Dónde se graba 'The Chosen'?

En el ámbito de las series dramáticas históricas, The Chosen se ha ganado un nicho único, cautivando al público con su representación de la vida de Jesús. Ofrece un retrato íntimo a través de los ojos de quienes lo conocieron. Ambientada en la Judea y Galilea del siglo I, la serie se esfuerza por dar una representación realista de la época, brindando una perspectiva nueva sobre el viaje del Mesías mientras reúne discípulos, ayuda a los menos afortunados y hace sacrificios que dejan un impacto duradero en la humanidad.

Desde que se estrenó en 2019, la serie se ha vuelto extremadamente popular. La intención es que haya un total de 7 temporadas –ya se han estrenado 4– que cuenten de forma cronológica las historias recopiladas en los cuatro Evangelios. Sin contar, además, con los distintos spin-offs que ya han confirmado y completarían, junto a una película, el escenario completo de Jesús de Nazaret.

Una de las características distintivas de la serie es la representación realista de la época y su entorno. De hecho, sus productores han defendido la importancia de la construcción perfecta de este mundo para ambientar de manera minuciosa cada escena con el objetivo de preservar la autenticidad de la historia de Jesús y, al mismo tiempo, garantizar que siga siendo accesible para los espectadores modernos.

«No solo estamos haciendo un espectáculo; estamos creando una experiencia que transporta a los espectadores a la Judea del primer siglo», reconoció Dallas Jenkins, director de The Chosen, en una entrevista. Para conseguirlo, los estudios Capernaum de Fort Worth, en Texas, se pusieron a su disposición. Que estén especializados en escenarios históricos basados en la fe, sumado a los espacios amplios que tienen y la privacidad de la que disfrutan, fue determinante para que lo escogiesen como escenario.

El estudio cuenta tanto con decorados interiores como exteriores, lo que permite que la serie represente la vida en Oriente Medio de manera precisa. «En la primera temporada, comenzamos con más tonos marrones, porque queríamos que la gente sintiera la opresión», reconoce James Cunnigham, director de producción. «Y luego, a medida que avanzamos hacia Jerusalén, seguimos agregando más y más colores, solo para, con suerte, hacer que el siglo I cobre vida para la gente». Además, en el caso de los exteriores, dado que el clima texano es seco, cálido y similar al de Nazaret resulta adecuado como lugar de rodaje, ya que facilita la caracterización de los actores sin que se sometan a penurias climáticas.

Conforme la serie ha crecido en popularidad, en cambio, se hizo necesario también un avance en las localizaciones. Por eso, para la tercera temporada, el rodaje se trasladó al Campamento Hoblitzelle en Midlothian, también en Texas. El espacio con más de 1.000 hectáreas y alojamiento para 575 personas permitió al equipo de producción alojarse mientras grababan y construir un intrincado escenario bíblico, además de un estudio de sonido propio de 2.800 metros cuadrados.

En la cuarta temporada el rodaje volvió a desplazarse, cambiando incluso de estado e instalándose en Utah. Los impresionantes paisajes del estado ofrecen una sorprendente similitud con el terreno del antiguo Israel, lo qu e proporciona un terreno más auténtico. De hecho, se utilizó una antigua excavación en una de sus montañas para replicar em templo pagano cercano a Cesarea de Filipo donde tiene lugar la confesión de Pedro.

En concreto, la localización para la cuarta temporada se emplazó en Goshen, ubicada a 112 kilómetros al sur de Salt Lake City y cuyo terreno accidentado y panorámicas de altura permite a los espectadores sentirse como si estuvieran caminando junto a Jesús y sus discípulos por Tierra Santa.