'La Revuelta' busca audiencia regodeándose en las ofensas al catolicismo

El programa de la televisión pública, La Resistencia de TVE, presentado por David Broncano, sigue buscando la polémica a toda costa, y lo hace con un solo objetivo: ganar más audiencia. La más escandalosa de estas controversias ocurrió la noche del 31 de diciembre, durante las Campanadas de Nochevieja, donde Broncano y Lala Chus, como presentadores, no dudaron en tocar un tema profundamente sensible para millones de personas: la religión católica. En su afán por acaparar protagonismo en un evento de máxima audiencia, lo lograron, pero a costa de ofender gravemente a una gran parte de su público, especialmente a los que profesan la fe católica.

La polémica comenzó cuando, durante la retransmisión, la humorista Lala Chus mostró a cámara una imagen que parodiaba la tradicional estampa religiosa del Sagrado Corazón de Jesús. En lugar de la imagen de Jesucristo, la figura que apareció fue la conocida vaquilla de El Gran Prix, una caricatura que nada tenía que ver con los valores cristianos. Lo que podría haberse considerado un chiste inofensivo rápidamente se convirtió en un ataque directo a los sentimientos de millones de católicos.

Pero lo más grave de todo es que Broncano no solo no detuvo la situación, sino que, al contrario, se sumó a la broma, continuando con el gesto sin mostrar ningún tipo de arrepentimiento. La reacción de la Asociación Hazte Oír no se hizo esperar, y llevaron el asunto a los tribunales, alegando que este acto constituía una burla pública de las creencias religiosas, lo cual está penado por el artículo 525 del Código Penal español. Este artículo protegía los sentimientos religiosos de los ciudadanos, sancionando aquellos actos que despreciaban o ridiculizaban públicamente las creencias de una comunidad religiosa.

Pues bien, Broncano volvió a ignorar las sensibilidades y a avivar la polémica en su programa. Este lunes por la noche, apareció de nuevo la polémica estampa, pero esta vez con la imagen de Sergio Bezos, el cómico vallisoletano que es el nexo entre el público y el presentador. Bezos se encarga de darle voz a los espectadores y fue él quien, esa noche, llevó la estampa de nuevo a manos de Broncano durante el programa.

Aunque dudó un poco si mostrarla a cámara, al final no pudo resistirse y decidió compartirla con su audiencia. «Esto... Esto no lo podemos enseñar. La verdad, es que esto...», dijo Broncano antes de dejar que sus compañeros proyectaran la imagen en pantalla completa. La «estampa» no era una simple broma, sino una imagen de la cara de Bezos sobrepuesta a la tradicional imagen de Jesucristo, una recreación burlesca e inapropiada. Lo más grave es que no fue un error, sino algo planeado, como si el programa estuviera decidido a seguir faltando al respeto a lo que muchas personas consideran sagrado.

Este gesto provocó una inmediata reacción en Twitter, donde los seguidores del programa se mostraron preocupados por las posibles consecuencias legales. Muchos comentaron sorprendidos por las represalias que podrían recibir, mientras que otros, de forma irónica, le decían a Bezos que había «dado más trabajo para Abogados Cristianos».

Sin embargo, lejos de aprender de sus errores, el programa parece decidido a seguir con esta estrategia provocadora, buscando más atención a costa de la controversia. «Algún día os arrepentiréis de lo que hacéis. No os preocupéis, nadie os va a hacer nada. Será la vida quien os lo hará pagar cuando se apague repentinamente vuestra 'buena suerte' y no entendáis lo que os ocurre», decía un usuario en X.