La Giralda es el campanario de la Catedral de Sevilla. Construida inicialmente como alminar de la Gran Mezquita de Sevilla en Al-Andalus durante el reinado de la dinastía almohade, es, a día de hoy, un símbolo de la capital andaluza. Tras la expulsión de los musulmanes de la zona, se le añadió una espadaña de estilo renacentista, creando una mezcla de estilos arquitectónica que hacen a este monumento único en el mundo.
Para subir a la Giralda y contemplar las espectaculares vistas solo tendrás que subir unos 10 escalones, ya que la mayor parte de la subida se hace a través de una serie de rampas que, en la antigüedad, permitían subir al campanario a caballo.
Eso sí. Si vas a ver la Giralda, no puedes perderte la Catedral, uno de los templos góticos más grandes del mundo.