Imagen del documental 'Rioja. La tierra de los mil vinos', de José Luis López-Linares
El documental de López-Linares sobre La Rioja, radiografía sobre la tierra de los mil vinos
Conforta ver, en Rioja. La tierra de los mil vinos, otra España, no sólo posible sino real: abierta, laboriosa, eficaz, callada, hermosa, que respeta sus tradiciones y sabe aplicar las nuevas tecnologías. Una España que no tiene nada que envidiar, en algunos terrenos, a ninguna otra nación
Elogié hace poco en estas páginas el precioso documental de José Luis López-Linares España. La primera globalización, que ha alcanzado una enorme difusión: valora adecuadamente la actuación de España en América y deshace por completo las tesis sobre el presunto colonialismo español del ministro Urtasun. (Sin enterarse de eso, le concedió la Medalla al Mérito en las Bellas Artes de 2023: se marcó un gol en propia puerta por la misma escuadra).
Acaba ahora de estrenar López Linares, en FlixOlé, otro documental, Rioja. La tierra de los mil vinos: un hermoso retrato de esa tierra, de sus gentes y de sus viñedos. Más allá de su gran valor económico, el vino de Rioja posee un valor cultural indiscutible, enlaza los vientos que llegan del Cantábrico con nuestras raíces mediterráneas, da alegría, propicia el diálogo…
Escuchando los testimonios de estos bodegueros riojanos –muchos de ellos, mujeres– se aprecia ese amor a «la obra bien hecha» que Eugenio d'Ors propugnaba; la feliz unión de tradición y modernidad; la defensa a ultranza del trabajo, hecho con auténtica vocación…
Fotograma del documental 'Rioja. La tierra de los mil vinos'
Sin ser ningún experto, me declaro yo ferviente defensor del Rioja y de los vinos españoles, en general: del Ribera del Duero, del albariño, de tantas variedades del vino de Jerez, de muchos más… En la relación calidad-precio, me atrevo a decir que no tenemos competencia, en el mundo. No es un fácil patrioterismo: prueben a comprar, por 10 euros o menos, un vino en cualquier supermercado de Francia, Italia, Alemania, Inglaterra, Estados Unidos… No creo que encuentren nada comparable a muchos vinos españoles de ese mismo precio.
Puede parecer un tópico pero es verdad: como en tantas cosas, no sabemos valorar lo que tenemos a nuestro lado. Aplico a España lo que decía del Cid su Cantar: ¡qué grande sería, si no fuera por algunos de sus actuales políticos!
Una España abierta, laboriosa y eficaz
En momentos de tanto desánimo colectivo, por los continuos disparates que cada día sufrimos, conforta ver, en este documental de López Linares, otra España, no sólo posible sino real: abierta, laboriosa, eficaz, callada, hermosa, que respeta sus tradiciones y sabe aplicar las nuevas tecnologías. Una España que no tiene nada que envidiar, en algunos terrenos, a ninguna otra nación. No es el único ejemplo.
Como era lógico, en este documental vemos también los dos monasterios de San Millán, el de Suso (arriba) y el de Yuso (abajo). Emociona ver estos lugares donde, como decía mi maestro Dámaso Alonso, «dio su primer vagido» la lengua española: nuestra máxima riqueza cultural, por mucho que algunos insensatos luchen ahora contra ella.
Monasterio de Yuso de San Millán de la Cogolla
En San Millán, una vez más, recuerdo a nuestro primer poeta de nombre conocido, Gonzalo de Berceo. En su Vida de santo Domingo de Silos, con ejemplar humildad, reconoce no ser «tan letrado» (sabio) como para hacer «otro latino» (una obra culta, en latín). Él se limita a escribir en lengua vulgar: en el naciente castellano, la lengua «en la cual suele el pueblo fablar a su vecino». Y, como recompensa, aspira sencillamente a pedir «un vaso de bon vino». De la Rioja, naturalmente.
