Logran descifrar e interpretar una extraña partitura con un cántico cristiano de hace 500 años
Un legajo insertado dentro de un breviario del norte de Escocia desveló una de las composiciones musicales más sorprendentes aparecidas en Reino Unido
Investigadores escoceses han logrado identificar e interpretar una partitura de 55 notas de hace 500 años encontrada en 2021 en un Breviario de 1510 encontrado en la localidad de Aberdeen.
La partitura, depositada junto al breviario en la Biblioteca Nacional de Escocia en Edimburgo, ha sido sometida a un detallado estudio por parte de investigadores del Edinburgh College of Art y la Universidad Católica de Lovaina.
El resultado ha dejado asombrados a los investigadores: se trata de una composición polifónica del cántico religioso Cultor Dei, destinado a la liturgia de Semana Santa.
La importancia histórica y cultural del hallazgo es de importancia capital para Escocia y el Reino Unido, y es que hasta ahora se creía que no existían composiciones de música sacra en el noreste de Escocia de esa época.
Por si fuera poco, además de ser una pieza musical única, el breviario en el que se localizó es el primer libro completo impreso en Escocia. Se conoce como Copia de Glamis y es un compendio de oraciones, himnos, salmos y lecturas bíblicas que ya desempeña un papel fundacional de la cultura escocesa.
La composición del Cultor Dei se encontró en un folio separado, escrita a mano, con sus 55 notas repartidas en dos compases e insertada en la sección de Maitines, lo que indica que se compuso para la oración de la mañana.
Además, el descubrimiento ha permitido abrir nuevos caminos de investigación de legajos musicales antiguos y parcialmente conservados.
En ese sentido, el hallazgo subraya la importancia de las anotaciones tanto musicales como literarias al margen de breviarios y libros similares, de donde extraer información aparentemente oculta pero que guarda elementos que permiten reconstruir composiciones completas.
«Es muy posible que aún haya más descubrimientos, musicales o de otro tipo, acechando en las páginas en blanco y los márgenes de otros libros impresos del siglo XVI que se conservan en las bibliotecas y archivos de Escocia», declaró a Deadline News el director del proyecto, Paul Newton-Jackson, de la Universidad de Edimburgo.