Bajo la lluvia sale a hombros el Meme, en la Feria de Fallas
Corta oreja a sus dos novillos de Fuente Ymbro, manejables pero justos de fuerza

El Meme, con el primero de su lote, al que cortó una oreja
En una tarde de perros, con frío y agua, El Meme abre la Puerta Grande de la Plaza de Valencia, al cortar oreja a sus dos novillos. Javier Zulueta y Simón Andréu dan la cara, con reses de Fuente Ymbro, manejables pero con poca fuerza. Comienza así el tramo seguido de festejos de la Feria taurina de Fallas. Durará hasta el día de San José, con una corrida a la que ya ha anunciado que asistirá el Rey Felipe.
En este año de la catástrofe de la dana, las Fallas tienen un sabor especial, agridulce. En el recuerdo permanecen tantas víctimas pero la vida sigue y hay que continuar. El pueblo valenciano ha sido siempre trabajador y festero: sin olvidar la tragedia, sabe que debe mirar para delante. Y todo, como dice su precioso Himno Regional, «por ofrendar nuevas glorias a España».
La Feria taurina de Fallas ha sido siempre la inicial de primera categoría de la temporada. En el coso de la calle de Játiva se presentó como novillero Juan Belmonte. Aquí triunfaron Joselito e Ignacio Sánchez Mejías, Luis Miguel y Ordóñez, Aparicio y Litri, Paco Camino y Manzanares padre… Y los valencianos: Manuel Granero, El Choni, El Soro, Ponce, Vicente Barrera, Román…
Con pobre entrada –la tarde no está para ir a los toros– los tres novilleros no se amilanan: andan por los veinte años, debutaron con caballos la pasada temporada y han llamado ya la atención de los aficionados.El Meme se llama Íker Fernández, es aragonés, formado taurinamente en Salamanca. Es una de las últimas revelaciones. Ha comenzado esta temporada triunfando en Valdemorillo. El primer novillo no se emplea en el caballo pero acude pronto a la muleta y repite. El joven diestro, muy serio, torea con clasicismo y sosiego, logra derechazos templados. La buena estocada, algo trasera, merece ya la oreja.

Javier Zulueta dio la vuelta al ruedo tras el quinto toro bajo un intenso aguacero
El cuarto flojea, apenas lo pican, pero saca buen fondo. Se luce El Meme en los naturales, echando la muleta adelante y trayéndoselo muy toreado. Muestra más oficio de lo esperable, por su corta carrera. Se tira a matar de verdad, muy recto: otra oreja le da la salida en hombros.
Javier Zulueta ha despertado grandes ilusiones en Sevilla, es hijo del alguacilillo de la Maestranza (cuyo empresario es su apoderado). Su toreo es suave, templado, estético. Anuncian ya su alternativa en San Miguel: ¿posee ya el oficio y la madurez suficientes para ello?
Lancea con gusto al segundo, que recibe muy poco castigo. Lidia muy bien Curro Javier, como siempre. Logra algunos muletazos estéticos pero las caídas deslucen la faena, desigual. Mata con facilidad.
Al salir el quinto, comienza a llover. Este novillo empuja en el caballo, metiendo los riñones. Zulueta quita por saltilleras y sale apurado: no era el lance adecuado, con este toro, que va a su aire y se cae en banderillas: ¿por flojo o por un resbalón? Imposible saberlo. Luego, bajo una lluvia fuerte, Javier se luce en una serie de muletazos suaves pero el trasteo es desigual, concluye con desarme. Vuelve a matar con facilidad: me parece lo más positivo de su evolución.
La cuota valenciana la aporta Simón Andréu, de Chiva (igual que Ponce). Triunfó en Málaga en su debut, la pasada temporada. Se presenta con picadores en su tierra y lo da todo. En el tercero, está suelto, con el capote; voluntarioso y desigual, con los palos. El novillo se raja pronto. Simón logra al natural desmayado, en un trasteo desigual, rematado con una estocada caída.

Simón Andreu, con la muleta ante el primero de su lote
Después del quinto, en pleno diluvio, el festejo podía haberse suspendido pero el joven valenciano quiere torear, lo necesita. Con el ruedo convertido en un barrizal, acude a portagayola, muy lejos de toriles, como ahora es moda (para mí, difícil de comprender). Un verdadero gesto. Con la muleta, comienza también de rodillas, es pura voluntad. El novillo embiste con violencia pero se resbala varias veces. ¿Cómo se puede torear así? Pierde la oreja por la espada, la suerte en la que ha mostrado su inexperiencia.
El resumen es claro: El Meme ha elegido el camino del clasicismo; Javier Zulueta, el de la estética sevillana; Simón Andréu, el de la entrega.
Con este tiempo, no se puede juzgar bien el juego de los novillos ni las cualidades de los novilleros; los espectadores son héroes, por aguantar el agua y el frío. Las dos cosas las hemos vivido muchas veces en las corridas de Valencia. El coso es céntrico y hermoso: ¿nunca se planteará el dotarlo de una cubierta móvil? Me temo que no. La rutina del «sol y moscas» continuará. En un momento en el que los estadios de fútbol son comodísimos y espectaculares, mantener ese criterio me parece una gran equivocación.
ficha
- Valencia. Feria de Fallas. Jueves 13 de marzo. Pobre entrada.
- Novillos de Fuente Ymbro: en general, manejables, justos de fuerza.
- EL MEME, de celeste y oro, estocada trasera (oreja). En el cuarto, estocada trasera (oreja y salida en hombros).
- JAVIER ZULUETA, de rosa palo y oro, estocada fácil (petición escasa y saludos). En el quinto, buena estocada (petición y vuelta).
- SIMÓN ANDRÉU, de blanco y oro, estocada caída (silencio). En el sexto, pinchazo, media y dos descabellos (ovación de despedida).