Fundado en 1910
MADRID, 15/02/2022.- El director del Museo del Prado, Miguel Falomir,  da un discurso durante la presentación del nuevo diseño de las salas dedicadas a Goya y de una exposición de los bocetos del pintor aragonés, preparatorios del cuadro para San Francisco el Grande en Madrid, este martes en el Museo del Prado. EFE/ Miguel Oses

MADRID, 15/02/2022.- Miguel Falomir, durante la presentación del nuevo diseño de las salas dedicadas a Goya y de una exposición de los bocetos del pintor aragonés. EFE/ Miguel OsesEFE

Las dos 'Majas' de Goya ya están en el nuevo espacio habilitado por el Museo del Prado

El director de la pinacoteca ha presentado la remodelación del espacio donde ahora podrán admirarse unas de las obras más visitadas del Prado

Las dos Majas de Goya ya ocupan el espacio «que se merecen» en el Museo del Prado. Para ello se ha acondicionado una sala más amplia, y las obras se expondrán junto a dos bocetos del artista aragonés, apenas vistos hasta ahora, y junto a Venus recreándose con el Amor y la Música de Tiziano: obra pintada hacia 1555, reflejando la decoración que había en uno de los gabinetes del Palacio del valido Manuel Godoy.

En este gabinete, aparecían las Majas junto a representaciones de la diosa del amor, la Venus del Espejo de Velázquez, que ahora se encuentra en la National Gallery de Londres, y la de Tiziano en una pequeña copia.

Con esta composición contextual, a partir de la Venus de Tiziano y una escultura del siglo XVIII, se trata también de hacer « un guiño a las fuentes de las que bebió Goya», ha indicado el director del Museo del Prado, Miguel Falomir, en una sala que incluye también el retrato de la Marquesa de Santa Cruz.

Esta composición permite además resaltar la novedad y la modernidad que el pintor imprime en las Majas: «despojadas de referencias mitológicas», tal y como ha indicado la conservadora Gudrun Maurer.

La rehabilitación de un espacio más luminoso

Además, se han abierto los balcones de estos espacios dirigidos hacia el Paseo del Prado y el Jardín Botánico para crear una atmósfera más luminosa con luz natural, y se han pintado las paredes de un tono más cálido en lugar del «lúgubre» gris anterior, ha dicho el director de la pinacoteca.

A este nuevo espacio se han unido, en una sala contigua, los dos primeros bocetos preparatorios que Goya realizó para el cuadro del altar La predicación de San Bernardino de Siena ante Alfonso V de Aragón, destinado a una de las capillas de la nueva Real Basílica de San Francisco el Grande de Madrid.

Estos dos bocetos fueron los realizados por Goya para la «gran competición pictórica» que supuso el encargo de la pintura del altar de la basílica, y tras la que Goya obtuvo en junio de 1871 el encargo real de realizar uno de los siete cuadros, y permiten conocer el proceso preparatorio del artista.

Propiedad de la Fundación Tatiana Pérez de Guzmán el Bueno, el primero de los bocetos se había expuesto dos veces en 1900, en Madrid y Londres, mientras que el segundo se presenta por primera vez al público.

En esta sala se pueden contemplar también su Cristo crucificado, que le valió a Goya su ingreso en la Real Academia de las Artes de San Fernando, además de otros tres bocetos de cuadros de altar como las catedrales de Toledo y Sevilla.

Otras dos salas continúan el recorrido por los retratos pintados por Goya a partir de la década de 1870 y hasta el 1800 mostrando a los clientes que encargaban al pintor sus célebres retratos.

Recuperar las visitas al Museo del Prado

«Carlos III, cazador, Los duques de Osuna y sus hijos, Un garrochista, El general Antonio Ricardos, La reina María Luisa con tontillo o Carlos IV son algunos de los retratos de Goya que acoge esta sala, una muestra de la capacidad del artista de crear obras únicas en cuanto a composición y creatividad, así como la forma moderna de reproducir a la realeza», ha destacado la conservadora Gudrun Maurer.

Este acontecimiento se enmarca en el deseo del Museo del Prado de contextualizar sus obras y recuperar su relación con la ciudad, según ha dicho su director, que ha indicado «que aunque se están recuperando el número de visitantes, no se produce con la celeridad que había antes de la última ola de la pandemia».

Así, aunque la recuperación de visitas iba a ritmo ascendente, hasta el pasado puente de la Constitución, la variante ómicron de la COVID-19, ha hecho retroceder las visitas a la pinacoteca de Madrid, tal como ha reconocido su director: «estamos mejor que hace un mes pero lejos de las cifras del pasado noviembre».

comentarios
tracking