Varry Brava: «Queremos ir a Eurovisión y queremos ganar. Vamos a devolverle la gloria al festival»
Los murcianos se presentan al Benidorm Fest, del que saldrá nuestro representante en Eurovisión, con una canción homenaje a Raffaella Carrá: «Ella significa luz, energía, baile, fiesta; es alegría, es entrañable»
Una noche, Raffaella Carrá se les presentó en sueños a Aarön Sáez, Óscar Ferrer y Vicente Illescas. Sí, a los tres, porque los componentes de Varry Brava, que llevan desde 2009 contagiando su buenrrollismo en discos, festivales y salas de conciertos, tienen una mente común, la misma que les llevó a decir que solo ellos podrían devolverle la luz, el color (y la purpurina) al Festival de Eurovisión.
Este año hay una novedad en la forma en la que se elige representante español para la cita, que tendrá lugar en Turín el 10 de mayo: será en un festival, el Benidorm Fest o el 'Benifest', un evento que tendrá lugar en la ciudad alicantina los días 26,27 y 29 de este mes. En él, Azúcar Moreno, Blanca Paloma, Chanel, Gonzalo Hermida, Javiera Mena, Luna Ki, Marta Sango, Rayden, Rigoberta Bandini, Sara Deop, Tanxugueiras, Unique, Varry Brava y Xeinn tendrán la oportunidad de demostrar que llevan la canción perfecta para enamorar a Europa.
Los chicos de Varry Brava han sabido jugar esta baza y han compuesto una canción ad hoc para el certamen, que lleva además el título de la que iba a ser la presentadora de este año, fallecida el pasado 5 de julio. Papeletas las tienen todas; y si no ganan, seguro que nos harán bailar, como hicieron cuando vinieron a la redacción de El Debate.
–Varry Brava en Eurovisión… ¿Es una consecuencia lógica del devenir de la banda?
–A nosotros nos gusta meternos en este tipo de aventuras. Nos motivan, son pura fantasía, como todo lo que hemos hecho desde que empezamos con Barry... Hemos encontrado el momento adecuado para presentarnos, algo que llevamos anunciando desde 2014, y estamos súper contentos de haberlo hecho.
–Decís que sois los únicos que podéis devolver a España la gloria al festival. ¿Hace falta devolvérsela?
–Creemos que hay que devolverle el éxito que tuvimos nosotros, los españoles, en nuestras representaciones. Hace muchos años que no ganamos, hace muchos años que no tenemos buenos puestos, y nosotros queremos ir y queremos ganar.
–¿Os invitaron a participar o fuisteis vosotros los que os presentasteis?
–Venimos fantaseando desde hace años con ir a Eurovisión, pero realmente nos sabíamos qué puerta tocar o a dónde mandar el sobre. Pero entonces apareció el formato de Benidorm Fest. Le echamos cara y decidimos que era el momento.
–¿Compusisteis la canción de Raffaella específicamente para el festival?
–Sí, hemos hecho la canción para Eurovisión, para representar a nuestro país, porque creemos que representa la música española, la música mediterránea, y además hace un gran homenaje a una grande tan importante para nosotros, un referente en nuestra música, como es Raffaella.
–Vuestro último disco se titula Hortera. ¿Vais a dar una imagen hortera de los españoles en Europa?
–Maldita sea, ¡somos un país muy hortera! Hortera significa libre. El que es señalado como hortera es porque es desinhibido, porque viste y hace lo que quiere sin pensar en ninguna convención social. Y creemos que en el fondo nuestros artistas de siempre, en todos los ámbitos de la cultura, han sido horteras, han sido desinhibidos y no han tenido miedo de lo que pensaran de ellos. Y en parte por ello han sido grandes artistas y han creado grandes obras. Nosotros estamos en esa línea de «los horteracionistas». Y eso es lo que vamos a transmitir en Turín.
–El Benidorm Fest se celebra los días 26, 27 y 29 de enero. ¿Qué nos podéis adelantar sobre vuestra actuación?
–Va a haber todo... pero no podemos decir nada. Únicamente que TVE nos está dando todas las facilidades del mundo para llevar a cabo nuestras locuras. Va a ser un gran espectáculo: vamos a dar unas fiesta alucinante. Varry Brava multiplicado por mil.
–¿Qué opináis de este modelo abierto, democrático? ¿Es más representativo del panorama musical español?
–Nos parece que es una buena manera de seleccionar a un representante para ir a Eurovisión; hay mucha variedad en las 14 canciones, suponen una representación muy buena de la música española. Ahora el jurado y y el público tienen que hacer su trabajo y seleccionar la que crean que nos representa mejor. Ojalá se alargue en el tiempo, se vaya construyendo un gran Benidorm y que cada año la gente tenga emoción y ganas de ver quién es su representante en Eurovisión. Los eurofans nos están diciendo que estaban deseando un formato así. Así que nosotros contentos, el público contento y todos contentos.
–Entiendo que es una reunión de amigos más que una competición, pero ¿a quién tenéis más «miedo»? ¿Dónde veis más competencia?
–El formato del concurso es tan variado, no solo en la selección de canciones, sino también en la forma de votar, que podría pasar cualquier cosa. Vota el jurado español, y también cuenta el voto del jurado europeo, además del voto del público. Vamos con todas las ganas de ser nosotros, pero tampoco sabemos qué va a pasar; ¡ni nosotros ni nadie! Yo prefiero que las quinielas me toquen, en lugar de hacerlas.
–¿Por qué Raffaella Carrá para representar a España?
–La canción es una mezcla de nuestros autores españoles de la música disco y de la cultura mediterránea. Para nosotros Raffaella significa luz, energía, baile, fiesta; es alegría, es entrañable. A todo el mundo le cae bien y nos parecía una figura que nos representa, a nosotros y a la música que hacemos.
–Raffaella iba a presentar Eurovisión antes de fallecer y el festival es en Turín, en Italia. ¿Hay una estrategia detrás de esta elección?
–Más que estratega, es interesado. Creemos que el público italiano ha entendido muy bien lo que hemos hecho con esta canción, porque lo hemos hecho con todo el cariño y con todo el respeto. ¡Claro que era el momento de hacerlo! Si hubiera sido en Alemania no habría tenido tanto sentido. De todas formas, cada participante tiene su propia estrategia, alguna manera de transmitirnos su mensaje; su oportunismo, por así decirlo. O sea que todos hemos aprovechado también esta plataforma para brillar.
–Es una canción muy bailable, pero también tiene un mensaje: el de la insatisfacción, la búsqueda constante de la novedad, que nos deja vacíos. ¿Qué alternativa hay?
–Como en todas las cosas que intentamos hacer, aunque parezca sólo hay un montón de baile de purpurina, también tenemos nuestras capas, nuestro corazoncito y nuestra reflexión. En esta canción hay una historia de pena, una historia gris, una historia oscura de desamor para la que nos inspiramos en los autores de la época de los 60 y los 70, que nos han marcado mucho. Julio Iglesias, Raphael, Aznavour cantando triste... La figura de Raffaella tiene mucho que ver con cómo esa tristeza y esa pena, esa falta de colores, ese blanco y negro, fueron atravesados de repente por la purpurina y los focos y la luz y la música disco y la música de baile. Ella simboliza que cuando estás mal, siempre hay un gesto, siempre hay un movimiento, una melodía que te saca de ahí. Igual que en aquel momento la cultura, un poco más en blanco y negro y más setentera, fue atravesada por su luz. La tristeza se soluciona con luz. Eso es lo que queríamos transmitir.
–La influencia italiana está también presente en vuestro nombre. Brava es una canción de Mina Mazzini. ¿Qué significa ella para vosotros?
–Sentimos un gran amor por su voz, por su carácter, por su manera de interpretar, por su pose en el escenario, por lo que representa como artista. Nosotros hemos estado siempre muy ligados a la música italiana. Nuestros padres escuchaban mucha música italiana y lo hemos heredado.
–Dentro de los horribles meses de pandemia, ¿ha habido también luz y purpurina en vuestra trayectoria?
–Pues sí, ha sido un año y medio complicado, aunque ahora parece que por fin estamos viendo la luz. Cuando a finales de 2021 se anunció que empezaban a volver los festivales y nos imaginamos de nuevo delante de 15.000 personas nos emocionamos mucho. Aunque ha habido una recaída y ahora mismo ha vuelto la incertidumbre. Pero no podemos dejar de ser optimistas y pensar que volveremos a ver la luz. Ahora mismo estamos centrados en Benidorm y en Eurovisión, pero la carrera de Varry Brava sigue, tenemos un proyecto y esperemos que continúe con conciertos. También tenemos el proyecto de Dancetería junto a Miss Caffeina, que fue uno de los conciertos que dimos antes de la pandemia.
–Si el coronavirus lo permite, ¿qué conciertos tenéis a la vista?
–El 22 de enero en la Riviera de Madrid, el 5 de febrero en la sala Apolo de Barcelona y los demás están en nuestra web, varrybrava.com. Tenemos muchos festivales cerrados y confirmados, y nos morimos de ganas de salir de este pozo en el que parece que nos hemos metido de nuevo. ¡Queremos volver a bailar!