Borrar los fantasmas
El mejor antídoto para borrar los fantasmas de Ucrania es reencontrarse con la mejor versión del Madrid, la que enamoró al mundo y dejó perplejos a los aficionados de Juventus o Liverpool, que vieron cómo ampliaba sus vitrinas levantando el ansiado trofeo
Vuelve la Champions y el Madrid visita Kiev, el estadio donde levantó su última orejona, pero donde el año pasado aparecieron los gélidos fantasmas de Ucrania. Es hora de borrarlos. Los de Ancelotti han tenido dos semanas para conjurarse y romper el maleficio de la cuesta de octubre.
El escenario es el idóneo para recuperar el espíritu del trece veces campeón de Europa, del equipo que nunca deja de creer. El mejor antídoto para borrar los fantasmas es reencontrarse con su mejor versión, la que enamoró al mundo y dejó perplejos a los aficionados de Juventus o Liverpool que vieron cómo el Real Madrid ampliaba sus vitrinas levantando el ansiado trofeo. Mientras, ellos solo podían aplaudir a un equipo como los blancos.
El famoso espíritu de Juanito, donde no se da un partido por perdido, donde se suda la camiseta y donde se lucha por el escudo, lo encumbra hoy Karim Benzema. El galo espera seguir en estado de gracia con el gol y pulverizando récords como madridista que le sirvan para seguir escalando posiciones en la lucha por el Balón de Oro. Con media Europa rendida a sus pies, espera que Ucrania también capitule.
Carletto es experto en devolver al Real Madrid a la senda del triunfo. Con él en el banquillo, los blancos solo han perdido dos partidos consecutivos.
Se avecina una nueva noche europea donde todo son alicientes. Una victoria acercaría el liderato de grupo y sería la mejor forma de coger el puente aéreo el fin de semana con la maleta libre de presión.
