Regresa el GP de Imola a la F1, con mejoras para Alonso y Sainz y con Verstappen como líder

El triple campeón del mundo neerlandés Max Verstappen (Red Bull) llega líder del Mundial de Fórmula Uno al Gran Premio de Emilia-Romagna, el séptimo de la temporada. Una prueba que regresa al campeonato en el circuito de Imola (Italia), donde no se pudo correr hace un año debido a la tragedia derivada de las inundaciones que causaron 17 muertos y más de 35.000 desplazados.

El noreste de Italia sufrió un grave episodio de lluvias torrenciales que dejó 17 muertos y varios desaparecidos. Hasta 14 ríos se desbordaron y localidades como Cesena, Faenza y Riccione quedaron inundadas. El agua del Santerno rodeó el circuito de Imola y anegó varios tramos de carreteras cercanos a la pista.

El Mundial –que comanda Verstappen con 136 puntos, 33 más que su compañero, el mexicano Sergio Pérez– regresa a una pista mítica, la del Autódromo Enzo e Dino Ferrari, donde también apuntarán alto los españoles Carlos Sainz (Ferrari), que corre 'en casa', y el doble campeón mundial Fernando Alonso (Aston Martin). Dos semanas después de que el inglés Lando Norris (McLaren) lograse, en el Gran Premio de Miami (EEUU), su primer triunfo en la categoría reina.

Norris, nacido hace 24 años en Bristol, ganó en Miami por delante de 'Mad Max' –convertido en noticia al dejar de anotarse el triunfo por segunda vez en lo que va de curso– y del monegasco Charles Leclerc (Ferrari), tercero también en el Mundial, con 98 puntos.

Sainz –quinto, con 83 puntos: los mismos que Lando, que lo precede gracias a los resultados– acabó cuarto. Pero al ser sancionado con cinco segundos, por haberse tocado con el otro McLaren, el del australiano Oscar Piastri, perdió esa plaza en favor de 'Checo'; en una carrera que Alonso -octavo en el torneo, con 33- concluyó noveno.

Imola albergó las 26 ediciones (entre 1991 y 2006) del Gran Premio de San Marino. Las dos últimas coincidentes con los dos títulos mundiales de Alonso y con los históricos duelos que mantuvieron el genial piloto asturiano –que logró en esta pista una de sus 32 victorias (2005) y uno de sus 106 podios (al año siguiente) en la F1– y el séptuple campeón del mundo alemán Michael Schumacher. Cuyos siete triunfos en este circuito no iguala nadie.

En 1980 había acogido la única edición del Gran Premio de Italia que no se ha disputado en Monza. Y con esta nueva nomenclatura regresó al Mundial en 2020, para confeccionar el complicado calendario del certamen de la pandemia de la covid-19. Esa vez triunfó Hamilton, en una jornada en la que la entonces muy dominante Mercedes –que lo volvería a ganar una vez más al año siguiente– se aseguró matemáticamente su séptimo título de constructores seguido.

Un año después, se impondría Verstappen, que logró dos de sus 58 triunfos en la categoría reina en esta pista, al repetir victoria en 2022. Imola es un circuito «de vieja escuela, muy técnico, con algunas combinaciones complejas de curvas y zonas de frenada» –según lo definió Verstappen–, con una pista estrecha de 4.909 metros y 19 curvas, en el que hace 30 años (exactamente cumplidos el pasado 1 de mayo) perdió la vida el mítico Ayrton Senna, que ganó tres Mundiales para Brasil.

Los entrenamientos libres para la cuarta edición del Gran Premio de Emilia-Romagna han arrancado este viernes. Los ensayos se completarán el sábado, horas antes de la calificación, primordial en una pista angosta en la que será complicado adelantar; y que ordenará la formación de salida de la carrera del domingo. Prevista a un total de 63 vueltas, para completar un recorrido de 309 kilómetros.

Mejoras de Aston Martin

El nuevo morro del coche verde pudo verse este jueves por primera vez en Imola, montado en el AMR24, parece una pieza realmente interesante, que destaca por su estilizada punta y por un flap superior con una depresión en los extremos, con forma de ala de gaviota, que causaba bastante revuelo entre los analistas técnicos.

Fernando Alonso se encargó de bajar la euforia entre loa aficionados que tienen puestas unas expectativas muy altas en el español.

«Hay menos mejoras de las que se publican, cada vez que se trae algo, leo que hay un Aston Martin nuevo llegando a la carrera... hay novedades, pero también las llevamos a Japón, Jeddah o Bahréin y estamos donde estamos, competimos contra equipos muy fuertes y nos será fácil insertarse entre ellos cuatro, pero ojalá podamos acercarnos. Luchamos contra equipos 'top' que también traen mejoras y empezaron con una mejor base, así que debemos alcanzarles. Nuestro coche es mejor que el del año pasado y el progreso también, pero los resultados no».

Ferrari quiere ganar en ´casa´

El Ferrari es un «casi un coche nuevo», o eso ha dicho Carlos Sainz en la previa al GP de Imola. Tiene las entradas de aire laterales invertidas, al estilo de Red Bull y, como en este, el propio pontón se separa del chasis para abrir una rendija vertical hasta el suelo por la que entra el aire para los radiadores.

El suelo también es nuevo, así como las salidas de la refrigeración en la tapa del motor, para enganchas directamente con el lateral y enfocarse en el 'bean wing'. o segundo ala inferior en la zaga que enmarca la parte del escape.

La ganancia de tiempo con estas mejoras debería estar entre las dos o las cuatro décimas, aunque Sainz no se ha mostrado tan optimista: «Ya te digo que cuatro no son, y que el coche es nuevo y que el equipo ha hecho un esfuerzo brutal trayendo un coche prácticamente nuevo, pero con las ganancias marginales que hay en Formula 1 cuando las reglas ya están muy apretadas, no creo que nadie sea capaz de traer cuatro décimas a un circuito, así que no esperéis tanto», ha dicho.