Getafe 1-3 Sevilla
El joven Isaac Romero, con un doblete, despierta al Sevilla de la agonía y les mete en cuartos de final de Copa
El joven delantero marcó dos goles nada más arrancar la segunda parte que decantaron la balanza a favor del Sevilla
La reinvención de José Bordalás para convertir al Getafe en un equipo muy divertido de ver
Sucede que, cuando uno se encuentra en una mala dinámica, sin ver la luz al final del túnel, cualquier cambio de rutina funciona como un rayo de sol a lo lejos que te hace olvidar preocupaciones. Para el Sevilla, hundido en liga metido de lleno en una pelea que no le toca, ese cambio de rutina es la Copa del Rey y la la oportunidad de dejar malas sensaciones atrás.
Está lejos el Sevilla de ser un equipo redondo, pero en Getafe, en una fría tarde invernal, aprovecharon sus errores, supieron resguardarse en el momento de encendimiento local y cosecharon un buen triunfo (1-3) que les mete en cuartos de copa y mantiene vivas las esperanzas de un trofeo en esta temporada.
Arrancó bien el Sevilla el encuentro, buscando envíos largos a la espalda de la defensa adelantada del Getafe, donde la doble punta formada por el joven Isaac Romero y Lucas Ocampos se mostró predispuesta a esas carreras al espacio. Consiguieron pillar desprevenida a la defensa getafense en más de una ocasión gracias al omnipresente Boubakary Soumaré en el medio, robando y permitiendo contraataques.
Finalmente, en un saque de esquina donde el guardameta David Soria midió mal, Sergio Ramos cabeceó un centro de Suso para adelantar al cuadro hispalense.
Con ventaja en el marcador y siendo consciente de la mala situación del equipo, muy dubitativo en todo lo que hace, Quique Sánchez Flores echó al equipo hacia atrás y el Sevilla se metió en su campo, con las filas muy juntas, encomendándose a la resistencia que te ofrece Sergio Ramos defendiendo en el punto de penalti. Y pese a que el exjugador del Real Madrid dejó un par de buenos despejes, finalmente un error suyo propició el empate de Jaime Mata. Lo que Ramos te da, Ramos te quita.
El Getafe, pese a ser un equipo al que le han costado estos escenarios más posicionales, asumió sin problemas el reto de tener la iniciativa y dejó buenas secuencias juntando a mucha gente por dentro, con los laterales dando la profundidad. Tres nombres destacaron especialmente en esta tarea: Milla, Greenwood y Mayoral.
Milla recibiendo de los centrales, metiéndose entre ellos y organizando los ataques, dictando el ritmo de las posesiones; Greenwood participando por dentro, acelerando las jugadas y Mayoral con buenos apoyos descongestionando las posesiones y dándole sentido a las mismas.
El Sevilla, preso de su mal estado anímico, dejó de confiar en lo que empezó haciendo bien y se mostró tremendamente nervioso, sin capacidad para sumar salidas peligrosas ni descansar con balón. El portero Alberto Flores, titular tras la lesión de Dmitrovic en el calentamiento, no transmitió confianza en sus salidas y el carrilero Juanlu perdió muchos duelos por su zona.
Sin embargo, tras el paso por vestuarios, el Sevilla reseteó mente y se volvió a concentrar en hacer pequeñas cosas bien. Como dice el dicho: «empiezas haciendo lo necesario, luego lo posible y terminas haciendo lo imposible». El caso es que los de Quique encontraron la puerta abierta a la espalda de Gastón Álvarez y por ahí se coló Ocampos para asistir al joven Isaac Romero en el 1-2, nada más arrancar el segundo acto.
Ese temprano gol cambió el estado de ánimo del encuentro: el Getafe empezó a mostrarse ansioso, sin entender su desventaja, mientras el Sevilla dejó sus mejores minutos del encuentro, encontrando opciones al contraataque y desplegándose con facilidad. En una de esas, apenas siete minutos después del segundo tanto, el suizo Sow asistió al joven Romero que amplió el marcador.
Sin nada que perder, Bordalás agotó los cambios y se fue al ataque con todo lo que tenía: retrasó a Óscar al doble pivote con Milla, movió a Greenwood a la izquierda con Aleñá entrando en derecha y cargaba el área con Ünal y Mayoral. Quique, por su parte, no cometió el mismo error dos veces y, al revés que tras el 0-1, no metió al Sevilla tan atrás, defendiendo en una altura media donde Soumaré y Nianzou destacaron ganando sus batallas y cortando la amenaza rival.
Lo intentó el Getafe, cargando muchísimo el área e hinchándose a centros buscando probar las dudas de Alberto Flores, pero se fueron chocando contra todos los obstáculos que su rival ponía por el camino. La confianza de Greenwood se apagó, Milla dejó de mandar y la grada, poco a poco, dejó de creer en la remontada de su equipo.
La temporada pasada, el Sevilla salvó un mal curso a nivel nacional creyéndose que podían ganar la Europa League, hasta acabar consiguiéndolo. Ahora, la manera de salvar la temporada es la Copa del Rey. Ya han demostrado que creen.
Ficha técnica
Sevilla (5-3-2): Alberto Flores; Juanlu Sánchez (Jesús Navas, 46´), Tanguy Nianzou (Marcao, 80´), Sergio Ramos, Loïc Badé, Adrià Pedrosa; Boubakary Soumaré, Suso (Ivan Rakitic, 65´), Djibril Sow (Lucien Agoumé, 80´); Lucas Ocampos, Isaac Romero (Mariano Díaz, 70´)
Goles: 0-1 (Sergio Ramos, 8); 1-1 (Jaime Mata, 23); 1-2 (Isaac Romero, 48); 1-3 (Isaac Romero, 55)