Güler quiere que 'Arda' Madrid

Su fichaje por el Real Madrid revolucionó a la antigua Anatolia. Más de ochenta millones de turcos han seguido los latidos del imberbe Arda Güler desde que firmó por el campeón de Europa. Y esa presión de todo un país y de una prensa amarillista no le ayudó.

Durante meses escuchó desde su tierra que debía de jugar mucho más, que no podía continuar así. Y a veces hizo demasiado caso a los vocingleros de Ankara, Estambul y Esmirna. La verdad es que el joven talento de Oriente se lesionaba bastante porque su preparación física no era la del fútbol europeo.

Antonio Pintus, el gurú biológico del cuerpo técnico, le cogió por banda y le puso en vereda. Le añadió casi tres kilos de músculo. Esta temporada le sumará algún kilo más de potencia. Futbolísticamente era y es un mago de la pelota, tiene una zurda de platino, pero Ancelotti fue piano piano con el chico porque no bajaba a defender. Estaba acostumbrado a emplearse en ataque y a no sacrificarse para recuperar balones. Por eso no compitió lo que esperaba. Ahora todo ha cambiado. Guler ha asimilado lo que es el Real Madrid.

Hay que correr como el que más

Arda habló con Carlo y Davide Ancelotti para saber con realismo qué le faltaba para disfrutar de mayor protagonismo. En el Real Madrid son muy claros en estas cosas, porque el éxito exige ser muy crudos con el fin de que los futbolistas evolucionen.

Los Ancelotti le dijeron que todavía necesitaba mayor progresión física y que tácticamente debía correr más, defender, sacrificarse en la recuperación de balón y ayudar en esa misión constante a sus compañeros. Técnicamente lo tiene todo, pero necesitaba dar un salto adelante en el trabajo sin balón. Es el fútbol moderno, que pide que los profesionales sean multifuncionales. Arda escuchó los consejos y se los grabó en su cabeza. Tenía que ser más completo en múltiples facetas para disputar más encuentros en el mejor equipo del mundo. Dicho y hecho. Se puso a trabajar.

Bien aconsejado en la distancia corta, el muchacho analizó que para poder realizar todo ese trabajo defensivo necesitaba dar otra vuelta de tuerca a su condición aeróbica. Solo tiene 19 años y está en pleno crecimiento y formación muscular. Le pidió a Pintus un plan de trabajo específico en el verano para avanzar de manera fundamental y se puso manos a la obra.

Brillante en la Eurocopa, líder con 19 añitos de la selección turca, Arda comenzó su pretemporada particular unos días después de ser eliminado en Alemania. Para el chaval estas vacaciones serían distintas. Por supuesto que ha descansado, pero durante dos horas diarias realizó un entrenamiento basado especialmente en la potencia y resistencia, con el reto de obtener esa fuerza necesaria para ayudar en la labor destructiva del sistema de Carletto.

Todos los futbolistas hacen un trabajo físico relevante en las vacaciones con el fin de no desperdiciar la condición adquirida a lo largo de un año. Pues Guler añadió una ejercitación extraordinaria.

El número uno de la clase

El resultado de ese sacrificio es evidente. Ha llegado a la pretemporada del Real Madrid en un estado físico admirable. Si Lucas Vázquez suele ser un ejemplo de una condición perfecta cuando se incorpora al trabajo tras las vacaciones, Guler le ha emulado.

Carlo Ancelotti ha valorado esta apuesta del turco por ser importante en el equipo. El chico de 19 años ha madurado y ha demostrado que sabe lo que hay que hacer para tener minutos en 'el equipo a batir para todos los rivales', como todo el mundo destaca.

Jugar en casi todos los partidos

Arda va en serio, es el mensaje cifrado. Quiere ser protagonista. Desea participar en la mayor parte de los setenta partidos que el conjunto blanco puede celebrar en este curso, con el plus extraordinario de los siete posibles encuentros del nuevo Mundial de Clubes que se celebra en junio y julio del próximo año.

Ancelotti ha elogiado el paso adelante que Arda ha dado mentalmente. Y ha subrayado que el chaval puede cubrir muchas posiciones gracias a esa clase de superdotado que atesora. El responsable del plantel ha señalado que Guler puede jugar de media punta, en el vértice del rombo que ocupa Bellingham. También ha reflexionado el italiano que el joven mago de la pelota puede ejercer de extremo derecha falso, para entrar en diagonal y sacar su zurda divina en el disparo. Sin respiro, Carlo ha rematado que su visión de juego y su regate le permiten igualmente ser interior por la derecha o por la izquierda. Guler quiere que Arda Madrid.