Vinicius y Brahim devuelven a la victoria a un Madrid con la mirada puesta en la Supercopa de Europa

Con los tres pitidos finales del árbitro en Charlotte arranca la temporada para el Real Madrid. Los de Ancelotti regresan de Estados Unidos con dos derrotas, una victoria y una sensación: la de que Vinicius, a las puertas de un Balón de Oro, quiere seguir siendo el alfa en la delantera del equipo de Chamartín.

Poco se puede reseñar de los partidos de la pretemporada, centrada más en la recaudación económica que en la planificación deportiva. Ante la falta de los pilares del, a priori, once del Madrid, Ancelotti colocó en el campo a lo más parecido que tenía a su disposición.

Brahim reclama su sitio

El Chelsea, que con tantos jugadores en plantilla aún no tiene claro a lo que juega, salió más entonado que el equipo blanco, que se fue asentando con el paso de los minutos. La movilidad de los delanteros brasileños, acompañados por un muy buen Brahim, hizo que no tardaran mucho en perforar la portería de los londinenses.

Una jugada construida por el delantero internacional por Marruecos fue finalizada de forma rocambolesca por un Lucas Vázquez dubitativo y un Ceballos que se atribuyó el gol como autorregalo de cumpleaños, poniendo el 1-0 en el marcador.

Un centro del campo inexistente para ambos equipos convirtió el partido en un correcalles. Sterling se empeñaba en ser el protagonista de la noche, pero pronto se evidenció la teoría de la manta. Pasan los años y los futbolistas, pero el Real Madrid sigue siendo letal a la contra. Una extraordinaria asistencia de Vini con el exterior fue culminada con un excepcional mano a mano de un Brahim que quiere adelantar a Rodrygo en la rotación.

Cuando todo apuntaba a un paseo del campeón de Europa, ocurrió algo que era impensable hace unos meses y que se ha vuelto casi habitual durante la gira: un error de Courtois. El arquero belga dudó en salir a atrapar un balón llovido, ante la incredulidad de un Fran García que parecía confiar plenamente en el usual superhéroe. Madueke se encargó de embocar, acercando a los ingleses en el marcador.

Poco tardó Ancelotti en alinear a Lunin, que tuvo que salvar a sus compañeros del empate tempranero que buscaba Nkunku. Hasta que la gasolina aguantó, los balones volaban de un extremo a otro del campo. Un gran desempeño de Modric como mediocentro, la buena actuación de Lucas Vázquez en defensa y la superioridad física de Militao y Rüdiger permitió a los merengues continuar con su ventaja.

Llegado el minuto 65, era el turno de los canteranos. Salieron los brasileños para dar entrada a Latasa, Asencio y Nico Paz. El argentino ha sido de lo mejor de la pretemporada, junto a Joan, haciéndose notar cada vez que participa en los encuentros y demostrando que está preparado para algo más que volver al Castilla.

Con la mirada puesta en Varsovia, Ancelotti ya piensa en afrontar el primer título de la temporada. Una semana de entrenamiento es de lo que dispondrán los titulares para tratar de derrotar a la Atalanta y poder levantar la Supercopa de Europa.