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Eduardo Camavinga disputa un partido con el Real Madrid esta temporada

Eduardo Camavinga disputa un partido con el Real Madrid esta temporadaGTRES

Camavinga, el tesoro mejor guardado del Real Madrid

  • Fichado con 18 años, el francés ha vuelto a renovar por seis campañas con la casa blanca, todo un reconocimiento a un futbolista multiusos que se ha convertido en imprescindible

  • La pasada temporada disputó 59 partidos y ahora ha jugado todos los de este curso: interior, mediocentro y lateral izquierdo, nadie tiene tal polivalencia como tanto rendimiento. Es intransferible

Fue anunciado el 31 de agosto de 2021, en las últimas horas del mercado veraniego, pero el Real Madrid lo tenía asegurado desde muchas fechas antes. Era toda una explosión de futbolista con 18 años, un centrocampista con una capacidad defensiva monumental que ya entraba en los planes de Didier Deschamps en la selección francesa. La casa blanca le había espiado desde hacía mucho tiempo y lo tenía atado y bien atado.

Robaba balones, presionaba, era incansable y a sus facultades físicas añadía una calidad ofensiva importante. Eduardo Celmi Camavinga anhelaba avenida al conjunto blanco y todo estaba hecho. Nunca 30 millones han producido tanto. Hoy está valorado en 130 millones, pero para la dirección deportiva madridista es intocable, intransferible. Cláusula de mil millones. Ha renovado de nuevo por seis años con una mejora sustancial de su contrato. Es un jugador hecho para el Real Madrid.

Comenzó jugando de interior izquierda, para ejercer de mediocentro cuando el equipo lo necesitaba. Esa es su posición ideal, la que más le gusta, pero su versatilidad y su eficacia significaron que Ancelotti le utilizará también como lateral izquierdo, porque en realidad era un centrocampista más por la izquierda. Como Eduardo dice, «yo en el Real Madrid jugaría hasta de portero». Estamos seguros que también lo haría bien.

Que juegue de lo que sea, pero que juegue

Es verdaderamente el tesoro escondido del Real Madrid, el oro mejor guardado. Una solución para cualquier puesto, porque ha ejercido de interior derecha e izquierda, de pivote y de defensa. De lo que le pongan. No hay problema para un todo terreno que destroza a los rivales con su potencia física en los segundos tiempos, como vimos en Montjuic. No sorprendió a nadie, la dirección deportiva sabía que sería así.

«Que juegue de lo que sea, pero que juegue, porque siempre lo hará bien». Es la frase que se escucha en los entresijos del club.

Debe ser mediocentro

El análisis técnico de la entidad especifica que debe ser protagonista como mediocentro, porque es su sitio idóneo. El proyecto de futuro, en efecto, es que Tchouaméni y Camavinga formen un dueto en el centro del campo pleno de potencia, destrucción defensiva y robo de balones para cortar el contragolpe del enemigo y comenzar la acción ofensiva del Real Madrid. La eficacia, fuerza, energía y resistencia de los dos franceses es el pilar de la planificación del equipo blanco para el próximo lustro. Aurelien tiene contrato hasta 2028 y Eduardo hasta 2029. Todo está programado. La lesión de Tchouaméni hará que Camavinga sea el pivote en la mayoría de los partidos de las siguientes seis semanas.

En una visión general, la continuidad de Kroos y de Modric retrasa la ejecución definitiva de un plan, el del dueto francés en el eje, que está trazado, dibujado, pensado. Hemos visto que «Cama», como le llama el vestuario, ha jugado en numerosas ocasiones de lateral izquierdo. Ancelotti explica que todos deben entender esta decisión, porque le permite añadir un quinto centrocampista encubierto por la zona izquierda que cubre las espaldas de Kroos. Con esa protección detrás, todo un seguro de vida, el alemán puede dirigir al equipo sin tanta preocupación defensiva.

Araujo ante Camavinga en una de las acciones polémicas del partido: el Madrid pidió penalti

Araujo ante Camavinga en una de las acciones polémicas del partido: el Madrid pidió penaltiAFP

Todo está estudiado tácticamente. Y desde la banda izquierda comprobamos que la aportación de Eduardo es monumental. Se convierte en un lateral que muerde, roba y sube hasta arriba, incansable, hasta destrozar a los rivales que tienen la mala suerte de toparse con él en esa banda. Es insoportable para los contrarios, especialmente en la última media hora de cada partido, cuando el físico decae para todos menos para este francés que sigue corriendo y sigue subiendo y sigue bajando sin parar. Camavinga fue determinante frente al Barcelona con el estallido de todas estas virtudes, unas características que aporta habitualmente en cada encuentro.

Para Bellingham es oro puro

Ese es el fútbol que Eduardo despliega un día sí y otro también, en la posición que sea. En Barcelona observamos un último ejemplo. La potencia constante del francés por la izquierda permitió a Bellingham dedicarse por fin a las funciones ofensivas, sin tener que bajar al centro del campo, y marcar la diferencia con su talento goleador. «Cama» fue, es, oro puro para poder cantar 'Hey Jude'. La conexión con el inglés no solo se vive en el campo, sino también fuera del césped.

Camavinga y Bellingham, dos imberbes

El toro francés y el mago británico definen el carácter del Real Madrid del futuro. Dos chavales veinteañeros que se comen el mundo en el césped y que se han ganado a la afición. Los dos son buenos amigos, se gastan bromas, dialogan constantemente y comparten y discuten sus gustos musicales.

Eduardo y Jude son la mejor expresión de lo que es el fútbol total de esta época. Dos talentos surgidos de la precocidad que apoyan su calidad en un poderío físico envidiable. El balompié actual parte de una condición física que debe ser memorable para poder triunfar. Los dos cumplen todos los requisitos. Tienen el orbe del balón a sus pies.

Bellingham, con Camavinga, en la celebración del gol del inglés al Nápoles

Bellingham, con Camavinga, en la celebración del gol del inglés al NápolesAFP

El francés lo demostró desde el primer día. Jugó 40 encuentros en su primera campaña. Alcanzó la bestialidad de 59 partidos el curso pasado. Y ahora lleva un ritmo similar. Ha intervenido en 14 duelos, al igual que Rüdiger. Ha renovado por seis años. Sólo Camavinga y Güler tienen ficha hasta 2029.

Camavinga es el jugador del futuro

El tanque del pelo con borlas es el fiel exponente del balompié que nos espera. Ganó la Liga y la Champions con 18 años. En esa Copa de Europa fue fundamental con su derroche físico en los segundo tiempos que transformó al Real Madrid hasta llevarlo al título continental. Es el motor que inyecta la sexta marcha cuando los demás ya bajan hacia la tercera. Ese pelo es de Sansón. Sus borlas rebotan en el aire de los estadios al ritmo incansable de un chaval que es imprescindible en el Real Madrid y en la selección francesa. Juegue en el puesto que juegue, el caso es que juegue. Buena definición técnica.

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