Real Madrid 2-0 Athletic Club
Un monumental Rodrygo acerca al Real Madrid al título de Liga
El brasileño desatascó a un Real Madrid inconsistente por momentos. Ahora todas las miradas se centran en la eliminatoria contra el Manchester City
¿Por qué juega el Real Madrid de morado ante el Athletic?
Las indumentarias, con el Athletic de blanco y el Real Madrid de morado en el Bernabéu, confundían al espectador; los calendarios, con ambos conjuntos más pendientes de su próximo partido (el Real Madrid la ida de cuartos de Champions ante el Manchester City, el cuadro vasco la final de Copa contra el Mallorca) desconcentraban a los jugadores. Y, sin embargo, había muchísimo en juego en el césped del Santiago Bernabéu.
Los de Ancelotti llegaban con el aliento del Barça en la nuca, necesitando ganar para mantener su ventaja y afrontar la exigente eliminatoria europea con una mayor tranquilidad. Los de Valverde, en vísperas de una final de Copa que puede darles el ansiado título, pero también apurando sus opciones de clasificarse a la próxima Champions League, necesitando vencer para no descolgarse tras el triunfo del Girona ante el Real Betis. Se guardó algunos titulares el exentrenador del Barcelona pensando en ese partido copero, pero salió con un once de lo más competitivo al césped.
De entrada, comenzamos con la enésima innovación de Carlo Ancelotti en lo que llevamos de temporada. El técnico italiano ha estado toda el curso intentando sacar la mejor versión de sus pupilos, sin temblarle el pulso a la hora de implementar cambios de sistema o de posición en los jugadores. Que si Vinicius delantero y Bellingham por detrás, que si Bellingham media punta y Vinicius en banda o, la que se había convertido en norma, Vinicius extremo y Bellingham de delantero centro.
Ocurre que esa posición del inglés, la de ´9´ del equipo, chocaba con la que, para Carlo, también es la mejor posición de Brahim. Desde ahí se entiende que el ahora internacional por Marruecos haya estado jugando algo menos de lo que seguramente merecía. Ancelotti le veía como un sustituto de Jude, no como un complemento.
Pero en la visita del Athletic al Bernabéu, Vinicius no estaba. Así que Ancelotti, a la hora de rellenar ese hueco, se decantó por juntar a Bellingham y Brahim. Y como a los dos les ve de delanteros, pues ambos iban a jugar ahí. Salió el Real Madrid al césped con un 4-2-2-2 en el que Kroos era la pareja de Tchouaméni en el mediocampo, Valverde partía desde la banda derecha, Rodrygo desde la izquierda e inglés y marroquí conformaban una doble punta muy móvil y dinámica.
Esto, además de potenciar a estos dos jugadores, también lo hace con Rodrygo, que se encuentra más cómodo en una banda izquierda en la que, por motivos obvios, no es el principal candidato. El brasileño, desde esa banda, abrió el marcador con un golazo marca de la casa: una conducción hacia dentro resuelta con un latigazo al palo largo. La resistencia bilbaína no duró mucho.
Tras el frenesí de esos primeros minutos, tocaba la pausa. Con ventaja, templar el partido. Pero el Real Madrid, a la par que ha llenado su plantilla de músculo y velocidad con sus últimas incorporaciones, también carece ahora de un mayor control en sus posesiones. O se lo da Toni Kroos, o destaca por su ausencia. Y el Athletic aprovechó esto para amenazar la portería de Lunin.
Lo hizo principalmente por su banda izquierda, la derecha blanca. El delantero Gorka Guruzeta, finísimo en el juego en apoyo, permitía a los suyos inclinar el campo a su favor, y el rápido Álex Berenguer amenazaba a la espalda de Carvajal. Tuvo que aparecer en más de una ocasión Antonio Rüdiger, como un bombero, a apagar los fuegos imponiéndose en las coberturas y recuperando el balón. El alemán se llevó una merecida ovación del Bernabéu y sigue confirmando su gran temporada.
También apareció Lunin, providencial sacando un remate a bocajarro del Athletic en una jugada a balón parado. Confirmada la nueva lesión de Courtois, y viendo el exigente tramo de temporada que se les viene a los blancos, van a necesitar pararas como esa del ucraniano. De las que hagan recordar al belga.
Ernesto Valverde confirmó, con su decisión de quitar a tres titulares antes de la hora de partido, la prioridad que le da al partido de copa y la querencia por evitar riesgos y desafortunadas lesiones. Se recolocó Iñaki Williams como delantero centro, buscando sorprender a la espalda de los centrales rivales, pero su equipo le nutrió de pocos balones.
Quien sí estuvo especialmente encendido fue Rodrygo Goes. Aupado por su gol inicial, su constante intercambio de posición y de alturas con Jude Bellingham ayudaban a su equipo a salir con peligro, pero el Real Madrid estuvo muy desacertado en el gesto final, desperdiciando ocasiones que les dieran tranquilidad.
Finalmente, las cosas cayeron por su propio peso. Si los otros no tienen el día, pues me tocará resolverlo a mí. Eso debió pensar Rodrygo, que culminó su fantástico partido con otro gran gol, aprovechando una nueva jugada donde los de Ancelotti encontraron espacios a la contra.
Ancelotti se dio el lujo, con el partido resuelto, de dar entrada a Éder Militao. El defensa brasileño se rompió, precisamente contra el Athletic en la primera vuelta, el ligamento cruzado de su rodilla. Las previsiones más pesimistas le descartaron para toda la temporada y, sin embargo, regresa para el tramo más especial. Con un buen Militao el Real Madrid es un equipo bien diferente. Uno mucho mejor.
Con este triunfo, el conjunto madrileño mantiene su ventaja de ocho puntos con ocho jornadas por disputarse. Se pueden permitir hasta dos pinchazos en ese tramo y aún así ganar esta competición, una que han dejado encarrilada gracias al talento inmenso que tiene su plantilla. Hoy le tocó a Rodrygo, como tantas otras veces le tocó a Vinicius o a Bellingham. Si esta tiranía nacional se expande a Europa se verá en la eliminatoria contra el Manchester City. Pero eso será otra historia.
Ficha técnica
Athletic Club: Agirrezabala; De Marcos (Yuri, 57´), Yeray (Vivian, 25´), Paredes, Lekue; Vesga, Prados (Ruiz de Galarreta, 57´); Iñaki Williams, Sancet (Muniain, 76´), Berenguer; Guruzeta (Adu Ares, 57´)
Goles: 1-0 Rodrygo (min. 8). 2-0 Rodrygo (min. 73)