FIFA crea un brazalete para evitar el apoyo de los capitanes a la comunidad LGTBI en Qatar
Saca un brazalete con mensajes sociales para intentar acabar con esas reivindicaciones que, entre otros, harán Inglaterra y Alemania
Qatar se ha enfrentado por este Mundial a muchas críticas deportivas y sociales. Desde cuándo y cómo se juega este torneo, en fechas hasta ahora no vistas nunca, a la falta de derechos humanos.
Sin que la oleada de críticas baje, un asunto impulsado por varias selecciones participantes ha mezclado ambas quejas y lo hará visible en los partidos. Y es que algunos países saldrán al terreno de juego con brazaletes de capitán con los que denunciar la situación de colectivos perseguidos en Qatar.
Desafían a la FIFA
Es por ejemplo el caso de Alemania e Inglaterra, cuyos capitanes -Manuel Neuer y Harry Kane- ya han anunciado que jugarán los partidos del Mundial con un brazalete con los colores que representan al colectivo LGTBI. Eso está totalmente prohibido en Qatar, donde la homosexualidad es delito, pero también por la FIFA, que no deja mostrar ese tipo de mensajes.
La imagen de ver a grandes jugadores, conocidas en todo el mundo, con ese brazalete con los colores del arcoíris es muy potente por el contexto en el que se produce. Y es por eso por lo que la FIFA lleva meses intentando que no se produzca con amenazas de sanciones económicas y deportivas.
Invento de la FIFA
Casi a la desesperada, a pocas horas del inicio, la FIFA se ha inventado una nueva medida: crear su propio brazalete con el objetivo de frenar que lleven algunos países el suyo personalizado. Es la primera vez que la propia FIFA lanza un brazalete y la razón por la que se hace está claro.
En ese objeto que portan todos los capitanes la FIFA ha colocado varios lemas que en principio apoya cualquier aficionado y futbolista. Mensajes como «Salvemos el planeta», «Educación para todos» o «No a la discriminación» se leen en estos brazaletes.
Esto se ha anunciado a horas del inicio del Mundial al ver que Inglaterra, Alemania y otras cinco selecciones no han dado marcha atrás. Un 25% de los países que juegan este torneo tendrán a su capitán con un brazalete que muestra su apoyo a la comunidad LGTBI, perseguida en Qatar.
Lloris «respeta» a Qatar
De esta iniciativa se bajó Hugo Lloris, capitán de Francia, país que inicialmente se había adherido a esta medida. El portero galo renunció a esta propuesta argumentando que «hay que respetar» las medidas y tradiciones de Qatar.
Hay que señalar que quienes lleven el brazalete no autorizado por la FIFA -el que propone la propia FIFA o el clásico de cada selección- se enfrentará a sanciones económicas e incluso deportivas. Es la amenaza que lleva haciendo la FIFA en los últimos meses, sin efecto en quienes ya se habían adherido a esta iniciativa.