Alcaraz regala otra clase de tenis para alcanzar las semifinales del Mutua Madrid Open
El murciano tuvo un duelo muy complicado, pero que supo sacar dejando una lección de tenis efectivo
Después de un duelo de octavos de final donde le salió todo a Carlos Alcaraz y nada a su rival, el partido de cuartos fue la mejor prueba para ver cuánto le iban a exigir al murciano el resto de los jugadores que quedan en liza. El encargado de medirse este miércoles al gran favorito para hacerse con el Mutua Madrid Open fue Karen Khachanov, ruso de nacimiento, pero muy acostumbrado a la escuela española por los largos periodos que pasa entrenando en Barcelona.
Pronto se vio que Khachanov tenía un plan muy definido para tratar de vencer al murciano, con un tenis muy directo y cargando todo el juego al revés de Carlitos. Sin embargo, nuevamente el murciano dio una clase sobre cómo jugar al tenis y las distintas formas que hay de jugarlo, ya que, sin tener quizás su mejor día, supo sacar su versión más efectiva y derrotar al ruso por 6-4 y 7-5.
La primera manga fue una clara declaración de intenciones por parte de Khachanov, que nada tardó en explicarle a Alcaraz que derrotarle a él no iba a ser tan sencillo como lo fue con Zverev. El ruso empezó muy firme con sus servicios y golpeando la derecha a la perfección sin dar tiempo a que el español pudiera pasar al ataque. De hecho, en los primeros compases del duelo era Alcaraz el que tenía problemas para mantener el partido igualado, aunque lo iba haciendo y se mantenía calmado esperando a su oportunidad.
Esa tranquilidad le dio al murciano el premio que andaba buscando y en el quinto juego del encuentro ya era él quien mandaba en el marcador después de varios puntos algo extraños y las dudas del ruso en cuanto se vio algo apretado. Además, este break resultó ser suficiente para anotarse el primer capítulo del partido, no sin antes sufrir un poco en algunos de sus saques.
Cambio de guion en el segundo set
Con todo controlado y después de un primer set complicado, parecía que iba a ser el momento de que Alcaraz le diese al partido el golpe definitivo y pusiese la velocidad de crucero para hacerse con otra victoria por la vía rápida. No era ese el plan de Khachanov, que no bajó los brazos en ningún momento y siguió fiel a su estilo, que le sirvió para cambiar por completo el rumbo que estaba tomando el choque.
A las primeras de cambio Khachanov se puso por delante y complicó mucho las cosas al pupilo de Juan Carlos Ferrero, que desde su box le trataba de tranquilizar para que no diese el set por perdido. Y es que el ruso llegó a tener hasta dos oportunidades para conseguir un doble break que habría sido definitivo para la manga. En cambio, una gran dejada y un revés paralelo fueron suficientes para salvar esa situación delicada y hacer lo mismo del primer set, esperar a que llegara su momento.
Como suele ocurrir casi siempre con los grandes tenistas, la paciencia dio resultado y justo cuando el ruso estaba en disposición de sacar para set, Carlitos encontró el break que necesitaba y se reenganchó a esa segunda manga que él quería que fuese la última.
Así fue, no le valió solo con romper en ese noveno juego y tras poner el 5-5 en el décimo se lanzó a por una nueva rotura para finiquitar el duelo cuanto antes. Cosa que le salió a las mil maravillas, ya que tras un punto donde le acompañó la suerte volvió a tener una oportunidad de quiebre que aprovechó para ponerse en disposición de sacar para el partido, algo que tras un pequeño susto (0-30) supo hacer para ser el primer semifinalista del torneo.
Ahora Alcaraz tendrá un día para descansar y preparase para la recta final del torneo, donde primero espera al rival del duelo que tendrá lugar esta noche entre Daniel Altmaier o Borna Coric, una de las bestias negras de Rafa Nadal.