Jaume Munar, el tenista español que ha cambiado su forma de jugar para llegar mejor que nunca a Australia
El mallorquín ha hecho «la mejor pretemporada de su vida» para lograr los objetivos que tiene marcados este 2024
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Son muchas las promesas del deporte que se estancan en su carrera y no llegar a ser lo que se esperaba de ellos. Algo así le ha ocurrido a Jaume Munar, un tenista español que a sus 26 años, a pesar de ser todo un luchador en la pista, todavía no ha ganado ningún título ATP.
Por su carrera como júnior, Munar, nacido en Mallorca, prometía ser una de las mayores promesas del tenis español. Esta etapa estuvo marcada por su final en Roland Garros que perdió ante Rublev en 2014 y por proclamarse campeón de Copa Davis con España en 2013.
Debutó en el circuito profesional en 2014, año en el que ganó su primer título en categoría Future, diputado en su isla natal. En 2017, a sus 20 años, ganó su primer torneo challenger individual contra el australiano Álex de Miñaur en Segovia. 2018 fue su año de confirmación como una de las grandes promesas del circuito tras afianzarse en el top 200 y conseguir clasificarse por primera vez a un cuadro final de un Grand Slam (Abierto de Australia), donde cayó en primera ronda.
Carrera estancada
A pesar de ser una de las promesas del circuito ATP, la carrera de Jaume Munar se estancó. El mallorquín no ha conseguido nunca ganar un título a lo largo de su carrera, ni siquiera en la categoría ATP 250. Siempre ha estado rondando entre los 200 mejores tenistas hasta finales de 2018, cuando accedió al top 100. En mayo de 2019 logró su mejor posición en el circuito (52).
A diferencia de Munar, su principal rival durante la etapa de Júnior Andrey Rublev, sí que ha conseguido tener una carrera con grandes éxitos. El ruso ha ganado 15 títulos ATP, entre ellos un Masters 1.000, y está afianzado entre los 10 mejores tenistas del mundo. Actualmente es el 5º en el ranking.
El español, a pesar de ganar en varias ocasiones a Rublev como Júnior y de ser un tenista que se caracteriza por su lucha incansable sobre la pista, nunca ha conseguido despegar en su carrera, pero todo eso podría cambiar a partir de esta temporada.
Brutal arranque en Australia
Jaume Munar ha empezado más fuerte que nunca esta temporada, o eso ha asegurado él tras ganar el partido de primera ronda en el Abierto de Australia. Después de hacer parte de su pretemporada en la Rafa Nadal Academy de Manacor, donde entrenó el pasado diciembre junto a su amigo Rafa Nadal, Munar ha llegado a Melbourne como un tren de mercancías.
El balear pasó por encima del ruso Alexander Shevchenko (6-3, 6-3 y 6-1) en menos de dos horas para apuntarse la primera victoria del cuadro masculino del Abierto de Australia en primera ronda. Su próximo rival será el francés Mannarino, a quien ya se ha enfrentado en más ocasiones.
El mallorquín igualó su mejor marca a orillas del río Yarra que estableció en 2020 tras caer en su segundo choque ante el local Alexei Popyrin. Celebró con energía la victoria, con salto y el puño en alto, después de quitarse la espina clavada de la edición pasada, en la que cayó estrepitosamente en su estreno por un severo 6-3, 6-2 y 6-3 ante el checo clasificado de la previa Dalibor Svrcina.
Por su parte, el joven ruso (48 clasificado), que se convirtió en uno de los tenistas que más puestos escaló durante la campaña pasada, tampoco pudo superar al español en este segundo asalto después de que cayera contundentemente en el primer duelo que mantuvieron en 2022 sobre la tierra del Challenger de Marbella.
Los cambios de Munar
Jaume Munar desveló que ha hecho «la mejor pretemporada de su vida» tras ganar en primera ronda de Australia. «He hecho la mejor pretemporada de mi vida, con muchos cambios que me han hecho salir de mi zona de confort. Venía con expectativas de jugar muy bien pero luego la verdad es que no me esperaba ganar así de contundente», explicó el mallorquín.
Munar ha disminuido sus horas de entrenamiento para focalizarse más en mejorar aspectos de su tenis como el saque y la derecha, la cual ha cambiado «de arriba abajo», es decir, una derecha más plana y agresiva para hacer más daño al rival.
«Han sido seis años donde me había estancado a nivel personal, no en lo tenístico. Nunca conseguía introducir cambios abruptos. Mi juego es muy diferente ahora, intento irme más hacia adelante y romper barreras», comentó un renovado Jaume que siempre se le ha conocido por sus capacidades defensivas y su control desde la línea de fondo.
El principal objetivo de Jaume Munar para esta temporada es llegar al top 50 y finalizar la temporada habiendo conseguido cosas que antes no había logrado. Dar un paso hacia delante en su carrera estancada. Algo que sin duda lo tiene metido entre ceja y ceja y parece que después del primer partido en Australia lo está consiguiendo.