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Paula Badosa, durante su partido con Aryna Sabalenka

Paula Badosa, durante su partido con Aryna SabalenkaAFP

La campeona saca músculo y acaba con el sueño de Badosa en el Open de Australia

No pudo ser para Paula Badosa. Lo intentó la tenista española pero Aryna Sabalenka, número 1 del mundo y vigente campeona del Open de Australia, no dio opción a la tenista española y la derrotó de manera clara por 6-4 y 6-2. Poca historia tuvo el partido porque la bielorrusa activó el piloto automático y anuló por completo a la nacida en Nueva York que hizo su primer acto de presencia en unas semifinales de Grand Slam.

Era un partido con máxima expectación. Badosa venía haciendo su mejor tenis y Sabalenka llegaba con algunas dudas de su duelo de cuartos de final, que lo sacó con muchos apuros. Además, el hecho de que española y bielorrusa sean mejores amigas en la gira añadía cierto picante al duelo. Sin embargo, en la cancha no hay lugar para las amistades y la tenista de Minsk no tuvo piedad.

Y eso que la cosa no empezó mal para Paula Badosa. Entró muy bien a la Rod Laver Arena la catalana y en un abrir y cerrar de ojos se puso 2-0. Se sentía cómoda mientras Sabalenka seguía atrapada en los errores no forzados que tanto la penalizaron en los cuartos de final. Fue el único momento donde Badosa pudo creer en alcanzar la gran final, porque a partir de ahí Sabalenka reaccionó y no hubo manera.

De ese resultado favorable se pasó al 4-2 porque todos los errores de la bielorrusa se empezaron a convertir en ganadores. Por todos es sabido en el circuito WTA que el ritmo de bola que tiene Sabalenka, y más en pistas rápidas, es inigualable y muy difícil de contrarrestar. No tuvo manera Badosa, que se limitó a correr de un lado al otro de la pista hasta que no le daban las fuerzas y su rival completaba la jugada a placer.

Duro resultado en el segundo set

A pesar de que Sabalenka estaba tocada por una varita, Badosa se mantuvo con vida en el primer set y solo lo perdió por 6-4. La historia fue peor en el segundo, donde no hubo ningún tipo de opción. No aflojó ni un poco la número 1 del mundo y vigente campeona en Melbourne y puso la directa rumbo a la final. Rompió en el tercer juego del parcial y dejó el choque visto para sentencia y hasta lo encarriló más con un nuevo quiebre.

Se terminó viendo a Badosa sufrir en pista y celebrar con rabia se segundo juego de la manga porque el nivel de su amiga era incontestable. Se pidió a Sabalenka que elevara sus prestaciones porque Swiatek viene muy fuerte y dicho y hecho. La número 1 del mundo ya está en la final y espera a la 2 para regalar la batalla esperada por todos.

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