Más de tres millones de ocupados están en estado de precariedad

Este artículo es posible porque uno de los economistas más grandes que tiene este país, Daniel Lacalle, que el pasado 27 de julio se dedicó en Twitter a darle duro al Gobierno por su chulería generalizada a la hora de comentar los datos de la Encuesta de Población Activa, que publicó el Instituto Nacional de Estadística.

El tweet en cuestión decía que de los 21 millones que publica la EPA de trabajadores ocupados, había 1.657.500 que, durante el segundo trimestre de 2022, no había trabajado ninguna hora. No solo daba el dato, sino que adjuntaba el enlace del INE donde se había obtenido los datos.

Que casi 1,7 millones de trabajadores se los califique de ocupados cuando no han trabajado ni una solo hora en ese trimestre es para hacérselo mirar. En cualquier mente racional esos trabajadores no han estado ocupados en la actividad productiva del país, que es la que genera riqueza.

Desconozco que habrán hecho estos 1,7 millones de trabajadores que dice el INE que están ocupados, pero que no trabajan ninguna hora, no cobran nada, no aportan a la productividad media y se cuentan en las estadísticas como ocupados en lugar de parados.

Cuando vi el tweet, decidí que en el primer momento que pudiese me iba a poner a analizar los datos, para ver que otra información podía sacar que nos permitiese fotografiar la realidad del mercado de trabajo actual que tenemos.

Es una auténtica pena que la veracidad de la información que facilita el SEPE se haya echado a perder por la decisión de una comunista rancia, que ocupa el puesto de Ministra de Trabajo y que no le interesa que nadie sepa la realidad de lo que pasa, sea bueno, regular y malo.

La EPA en sus valores absolutos podemos decir que ha sido buena, hasta que nos ponemos a analizar los datos de la precariedad del trabajo que tenemos en la actualidad.

Le he llamado precariedad, a todos aquellos trabajadores que no trabajan ni una sola hora, por razones obvia, aunque en la realidad deberían de estar en la lista de los parados y no de los ocupados.

Pero además podemos considerar que están en una situación de precariedad todos los trabajadores que trabajan menos de 19 horas a la semana. El INE los subdivide en dos categorías, los que trabajan entre 1 y 9 horas y los que trabajan entre 10 y 19 horas, es decir que ninguna llega a trabajar ni media jornada.

Lo que he hecho también, para poder ver la realidad de nuestra EPA, es compararnos con el mismo período de 2019 porque, en definitiva, nuestra economía sigue estando todavía ligeramente por debajo de esa fecha y por lo tanto tenemos que ver que sucede en dicha comparativa.

Así que he extraído los números de la EPA de los trabajadores que el INE considera ocupados en esas categorías y compararlos en los dos períodos y así nos vamos a dar cuenta de otra de las grandes mentiras del sanchismo, que no servirán para sacarle de su puesto, pero que es nuestra obligación comunicar a los lectores de este diario.

Así tenemos que la EPA del segundo trimestre de 2019, dio como ocupados 19.840.900 y ya nos mostraba en aquellos momentos el importante número de trabajadores en situación de precariedad.

En esa EPA teníamos a 1.094.100 trabajadores ocupados que no trabajaban ninguna hora. Asimismo, nos daban 360.700 ocupados que solo trabajaban entre 1 y 9 horas y 767.600 que trabajaban de 10 a 19 horas.

En definitiva, teníamos en 2019, 2.222.400 trabajadores ocupados en situación de precariedad, que representaban el 11,2% sobre el total de ocupados.

La EPA del 2023, nos lleva a que los ocupados que trabajan 0 horas han crecido un 51,5 % y en total hay 1.657.500. Los de 1 a 9 horas crecen un 14,4 % y se van a 412.800 y por último los trabajadores que trabajan menos de media jornada crecen un 21,4 % y se van a los 932.000.

Por lo tanto, los trabajadores en estado de precariedad de sus contratos han aumentado un 35,1 % y han llegado a los 3 millones.

La EPA nos da que tenemos ocupados a 21.056.700 que es lo que tuiteó el presidente del Gobierno como su gran éxito, a pesar de que este Gobierno no ha hecho nada por crear empleo.

Lo que no dijo el presidente, entre otras cosas porque no sabe nada de esto, es que comparado con el segundo trimestre de 2019 la ocupación crece un 6,1 %, pero los trabajadores en estado de precariedad suben un 35,1 % y la precariedad que estaba en el 11,2 % del total de trabajadores, se dispara hasta el 14,3 % y crece un 27,3 %.

Es cierto, hemos crecido en el número de ocupados y lo hemos hecho en 1,2 millones, pero 800.000 de estos puestos de trabajo creados en los últimos 4 años son en realidad casi parados.

Por lo tanto, si a la cifra de paro oficial de 2,7 millones le sumamos, solo los que están ocupados, pero no trabajan ninguna hora, la cifra oficial de paro sería de 4,4 millones de parados.

Ojo a la cifra que produce escalofríos.

Pero si pensamos que, en cualquier momento, con las medidas que el BCE está poniendo en marcha para parar la inflación, hacen entrar a nuestra economía en parada de crecimiento, nos podríamos ir a una cifra de paro real de 5,7 millones. Y esta cifra produce todavía más escalofríos.