Inflación
Así sigue golpeando el bolsillo el precio del aceite, las legumbres, el pescado y la carne
Los salarios «siguen perdiendo poder de compra en lo básico», critican los sindicatos
El IPC baja al 3,2 %, pero el precio de los alimentos se mantiene en el 9 %
La persistente inflación; por José María Rotellar
Los alimentos siguen sin dar tregua al bolsillo. Después de más de dos años al alza continuaron encareciéndose de forma notable el mes pasado, un 9 % en comparación con el mismo mes del año precedente. Son el grupo que más crece en variación anual, por delante de las bebidas alcohólicas y el tabaco (7,1 %) y los hoteles, cafés y restaurantes (6,1).
«Los alimentos siguen concentrando la mayor subida», destacaba este jueves Joaquín Pérez, secretario general de USO. «Esto supone que, a pesar de que la subida salarial media de los convenios está ya ligeramente por encima del IPC, un 3,49 %, los salarios siguen perdiendo poder de compra en lo básico. Nadie se gasta un sueldo mínimo en ocio y cultura, eso se convierte en artículos de lujo en esas circunstancias, lo que sigue lastrando los sueldos es que los alimentos suben un 9 % anual y el transporte, en lo que va de año, ya acumula un 5,2 %».
Ello pese a que los alimentos y bebidas no alcohólicas fueron uno de los grupos que destacan en el mes de noviembre por su influencia en la disminución de la tasa anual. Mientras ésta retrocedió tres décimas el mes pasado, al 3,2 %, los alimentos lo hicieron en cinco décimas. «Lo que más influye en esta evolución es la bajada de los precios del pan y cereales y la leche, huevos y queso, frente a las subidas del año anterior, y que los precios de la carne han aumentado menos que en noviembre de 2022», resaltan desde Estadística.
«En el caso de los servicios y los alimentos sin elaboración, debido a la fortaleza de su demanda y la presión de los costes, se observa una mayor resistencia a la desaceleración de sus precios», abundan desde CEOE. Desde la organización empresarial destacan que los precios de los alimentos sin elaboración aumentan su tasa interanual en 1,7 puntos porcentuales hasta situarse en el 9,0 %.
«Esta evolución ha sido fruto de un comportamiento heterogéneo dentro de este grupo, ya que, aunque se observa una desaceleración en un número importante de rúbricas, algunas han mostrado una inflación por encima de la media, como la carne de ovino, las frutas frescas y las legumbres y hortalizas frescas», resaltan.
Los aceites y grasas siguen siendo, con diferencia, el alimento que más se encarece. Su precio se ha incrementado un 44,5 % el mes pasado en comparación con el que mostraban las estanterías en noviembre de 2022, y acumula una subida del 35,9 % en lo que va de año. En el caso del aceite de oliva el alza alcanza el 66,7 %. También siguen disparadas las legumbres y hortalizas frescas, cuyo precio se vio incrementado el mes pasado un 16,8 % en tasa interanual.
Las frutas frescas, por su parte, se han incrementado un 10 % frente a noviembre de 2022, y acumulan en el año un incremento del 15,2 %. En un segundo escalón, la carne de porcino y la de ovino suben un 12,9 y un 10 %, respectivamente, en tasa interanual.
En tasa mensual, los alimentos son precisamente el grupo que más contribución positiva tiene, avanzando ya la cercanía de las fechas navideñas. Así, aceites y grasas suben un 3,8 % en tasa mensual, seguido de legumbres y hortalizas (1,4 %), pescado y marisco (0,7 %) y la carne (0,3 %).
Para el año próximo, la previsión es que la inflación se sitúen el 3,5 %, tras cerrar diciembre en el 3,3 %, según la estimación de Funcas, mientras que la media anual del IPC subyacente se situará en el 2,8 %. Sin embargo, el servicio de estudios advirtió este jueves de que las previsiones de cara al próximo año «son más inciertas debido a que van a estar condicionadas por el calendario de la retirada de las medidas anti inflación: IVA de los alimentos, impuestos sobre la electricidad o precio del transporte público, entre otras».