El PIB crece por la deuda
Cuando lleguen nuevos políticos tendrán que pensar en poner en marcha planes de reducción del Gasto para poder lanzar planes estratégicos en sectores como la Industria y la Construcción
Todos los economistas que escriben en medios de comunicación independientes, que hablan en medios de comunicación que no son financiados con dinero público y todos los economistas que tienen sus tribunas particulares, dicen que el PIB del 2023 creció gracias al Gasto Público.
Hoy me uno a ellos con los datos que he obtenido del Instituto Nacional de Estadística y que demuestra lo que ha pasado en los 4 trimestres del 2023.
No tenía duda alguna de que las cosas eran así, pero a veces hasta que no te pones delante de los datos, las cosas no te quedan tan claras. Inmediatamente te das cuenta de que este país está manejado, como ya sabíamos, desde la Moncloa, que maneja incluso el PIB en base a lo que llevo mucho tiempo preocupándome, que no es otra cosa que la DEUDA PÚBLICA.
El gran problema de hacer que el PIB crezca fundamentalmente por el Gasto Público
Porque el gran problema de hacer que el PIB crezca fundamentalmente por el Gasto Público es que para financiar ese gasto, los ingresos por impuestos son insuficientes y no queda otro remedio que pedir prestado para pagar ese gasto público.
Es por ello por lo que lo que hay que decir, claramente, es que nuestro crecimiento es gracias a la deuda que tenemos que pedir para pagar ese exceso de gasto.
Que un país crezca solo con gasto público, si al menos tiene equilibradas las cuentas y no necesita endeudarse puede ser hasta razonable, sobre todo en momentos de dificultades.
Hay también maneras diferentes de crecer con el Gasto Público y con la Deuda y es el caso de Estados Unidos, que está creciendo gracias a las grandes obras de infraestructuras públicas que está acometiendo el Gobierno en base a 3 billones en inversiones, que está dinamizando la economía americana con esas grandes obras de puertos, aeropuertos y autopistas.
Nuestro caso es justo el contrario, no invertimos en obra pública, solo el gasto lo utilizamos para incrementar empleados públicos y en que esos empleados públicos consuman más.
No invertimos en obra pública, solo el gasto lo utilizamos para incrementar empleados públicos
La diferencia con Estados Unidos es que ellos el empleo que está generando es en las empresas privadas encargadas del desarrollo de las obras públicas, que el Estado dejará de pagar cuando se hayan terminado éstas y en cambio nosotros arrastraremos, hasta la jubilación, en el gasto a todos los empleados públicos que han entrado, pero lo peor es que lo han hecho la mayoría por las puertas giratorias del Estado, sin ningún control.
Pero veamos como ha quedado la composición del PIB en el cuadro que he preparado:
Lo primero que quiero que veamos es que el PIB ha crecido de forma muy regular gracias a la palanca pública.
El consumo privado, también llamado de los hogares e Instituciones sin fines de lucro, crece un 2,3 %, pero fundamentalmente por el crecimiento del tercer trimestre que lo hace un 1,2 %, porque el cuarto trimestre se muestra el agotamiento de este al crecer solo un 0,3 %.
Mientras que el Consumo Público no para de crecer acumulativamente, trimestre a trimestre, hasta llegar al 4,3 % al final del año.
La Inversiones vemos que se han quedado muy por debajo del crecimiento del PIB, porque la Inversión Pública no ha existido y vemos que en el último trimestre estas solo crecen un 0,2 %, habiendo decrecido un 1,0 % en el tercer trimestre.
Las exportaciones totales suben un 1,4 %, a pesar de que las exportaciones de bienes han decrecido como les mostraré en un próximo artículo, lo cual quiere decir que ha sido el turismo, con su cifra récord de más de 109.000 millones, el que salva el conjunto de las exportaciones de bienes y servicios.
Lo preocupante es que las importaciones de bienes y servicios han crecido también y estas nos restan a la hora de calcular el PIB.
Lo preocupante es que las importaciones de bienes y servicios han crecido también
Está claro que el Gasto Público y el déficit que ha generado no ha ido a Inversión sino a Consumo Público y hay algo que en la Moncloa saben, este gasto no puede seguir subiendo año a año, porque la deuda es finita, por mucho que desde las izquierdas piensen que no tiene fin.
Nuestro PIB es muy débil, cada día depende más del Gasto Público y de los servicios, sin un buen año de turismo este país entra en graves y serios problemas, como nos pasó en 2020 con la pandemia, en la que nuestro PIB se desplomó un 11,2 % y fuimos el país que más sufrió de toda la Unión Europea y de toda la OCDE.
Pero es lo que hay y cuando lleguen nuevos políticos tendrán que pensar en poner en marcha planes de reducción del Gasto para poder lanzar planes estratégicos en sectores como la Industria y la Construcción que tenemos completamente abandonados.