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08 de septiembre de 2024

Análisis económicoJosé Ramón Riera

A Carlos se le pone mal Cuerpo: la inflación crece un 35 % más que el año pasado

No por esperada, la noticia del IPC es menos preocupante

Actualizada 07:54

Acaba de publicarse el dato de inflación y es mi momento de hacer diabluras. Este artículo va dedicado en especial todos los trolls que tiene el Gobierno en X y a aquellos economistas que cuando el Sánchez dice que hemos crecido más del doble que la Unión Europea con un PIB cocinado, se enfadan mucho si yo digo que la inflación ha crecido un 17 %, que es lo que había crecido a finales de abril.

Esta vez, cuando El Debate postee este artículo, o lo haga Daniel Lacalle, me voy a poner a esperar las críticas tumbado en el sofá de mi salón, me voy a coger «figuradamente» un puro y un whisky –ya no fumo ni bebo– y me voy a reír de todos esos fangosos pagados por el Gobierno para atacar a los economistas liberales, que les damos cera a sus números y a veces hasta les pedimos que nos la pulan, digo la cera.

Con el cero del mes de mayo de 2023, era casi imposible que el IPC de este año no subiese

La verdad es que, no por esperada, la noticia del IPC es menos preocupante. Digo esperada porque con el cero de subida del mes de mayo del 2023, era casi imposible que el IPC de mayo de este año no subiese y así lo ha hecho, subiendo un 0,3 y llevando el IPC anual a un 3,6, que aunque no parezca una salvajada, está un 80 % por encima del objetivo del 2 %.

También en buena lógica, es de esperar que en junio, el anual caiga porque en junio de 2023 subió un 0,6. Porque, si por casualidad subiese, es que el problema español empezaría a ser muy grave.

En cualquier caso, el año pasado ya anticipé que la manipulación de la Sra. Manzanera iba a tener unas consecuencias muy serias en 2024 y ya se están viendo. Les recuerdo que además de bajar la ponderación de los subíndices que más daño estaban haciendo, los alimentos y los costes energéticos, en 2024 ya no surtirían efecto, pero el cambio de modo de calcular los costes energéticos, que los llevó a negativos todo el año, en 2024 se iban a volver en contra de ella y ya está pasando.

El problema es que en estadística, las trampas tienen caducidad. Cuando llegan los siguientes períodos y lo se porque de jovencito trabajé en una consultora de econometría y sabíamos que cuando en un modelo se forzaba en un año una variable al período siguiente no salían bien los números, pero eso la Sra. Manzanera, parece ser que se le olvidó y hoy el ministro actual de Economía, Comercio y Empresas, debe de tener un cabreo monumental. Que la cese y que ponga a un profesional que no cocine números.

Estamos con un 35 % más de inflación que el año pasado a estas mismas fechas

La realidad es muy preocupante. Estamos con un 35 % más de inflación que el año pasado a estas mismas fechas y el problema es que nadie está haciendo nada para parar esta barbaridad.

Hay que tener en cuenta que además el resultado de noviembre es negativo en 3 décimas (que casualidad que es el que sirve para recalcular las pensiones) y en diciembre salió un 0, así que ojo a lo que se nos puede venir encima a finales de año, si ya, y lo digo ahora en junio, no se toman medidas como la de bajar más el IVA de los alimentos y quitarle el IVA a las carnes y a los pescados, para que al menos el índice de los precios de los alimentos sufra un parón.

Pero miren ustedes lo que les he preparado con los datos que facilita el INE:

Aquí lo tienen: de los 5 meses del año, 4 han sido peor que en 2023, excepto febrero, que los precios subieron menos que el año anterior, el resto de los 4 meses los resultados han sido peores, como en abril, o mucho peores, como en enero, marzo y mayo.

El resultado es que, a cierre de mayo de 2023, llevábamos una inflación del 1,7%, este año es de un 2,3%, que nos lleva aun ritmo anualizado de terminar en un 5,5%, que sería un desastre nacional, porque, automáticamente, las pensiones se revalorizarían en esa cantidad y no te quiero contar los salarios públicos y los salarios de los empleados de las empresas privadas, lo cual produciría una nueva espiral de precios al encarecer todos los productos fabricados en España, a la par que un déficit en la cuentas públicas, pues podríamos estar hablando de unos 30.000 millones más de coste entre pensiones y salarios públicos.

Esto el ministro Cuerpo lo sabe y lo que no se entiende es que no se ponga manos a la obra a proponer medidas en los Consejos de Ministros y a poner en marcha planes de contención de la inflación.

Yo entiendo que Sánchez, con el tema de Begoña, David, los jueces, los fiscales, Cataluña, el fugado y las elecciones europeas tiene que estar agobiado y no le preocupe nada más, pero alguien tiene que hacer algo para arreglar este desaguisado.

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