Cataluña afronta vencimientos de deuda por valor de 40.000 millones en cinco años y fía todo a una quita
La región ha participado desde el principio en los mecanismos de liquidez por su delicada situación financiera
La Generalitat de Cataluña afronta en los próximos cinco años vencimientos de deuda por un importe de 40.418 millones de euros, en gran parte atribuibles al dinero prestado a cargo del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA).
Así se desprende de una presentación a inversores elaborada por la Generalitat en la que se hace balance de la situación financiera de la administración catalana.
En concreto, la Generalitat afronta vencimientos de deuda por 7.864 millones en 2025, por 7.792 millones en 2026, por 8.106 millones en 2027, por 8.792 millones en 2028 y por 7.864 millones en 2029.
En el caso de 2025, por ejemplo, el FLA supone 7.331 millones de los 7.864 millones que se deben amortizar, otros 421 corresponden a préstamos extranjeros y 113 millones a préstamos nacionales.
Se trata de la mayor curva de vencimientos que afronta en los próximos años Cataluña, ya que en 2030 baja el importe y se situará en los 6.563 millones.
En los años posteriores continuará descendiendo por debajo de los 5.000 millones -4.873 millones en el año 2033- y de los 4.000 millones - vencen un total de 3.671 millones en el año 2034-.
Quita parcial
En este contexto, la quita parcial del FLA que, en la última Conferencia de Presidentes, el Gobierno prometió abordar en enero con las comunidades cobra especial importancia para autonomías como Cataluña. Actualmente la Generalitat tiene una deuda de 88.952 millones, y de esta cantidad 75.813 millones corresponden a los mecanismos de liquidez -el FLA principalmente-, lo que supone un 85,2 % del total.
En el momento que Cataluña consiga restar el 20 % del FLA -en torno a unos 16.000 millones, tal como acordó ERC con el PSOE en noviembre de 2023-, ello reducirá el volumen del pasivo de la Generalitat y, en consecuencia, también se recortarán sus costes financieros.
En teoría, la deuda vinculada al FLA pasaría a ser entonces de algo menos de 60.000 millones y la total de unos 73.000 millones, siempre de acuerdo a los últimos datos de deuda de la Generalitat, que son los correspondientes a junio de 2024.
La consellera de Economía, Alicia Romero, que ha celebrado el anuncio sobre el FLA hecho en la Conferencia de Presidentes de Santander, ha asegurado recientemente que en los próximos años la Generalitat podría ahorrar unos 1.500 millones de euros en intereses y unos 250 millones ya el año que viene gracias a esta condonación parcial.
Los 'hispabonos' que pidió Cataluña
En 2011, y en un contexto de crisis de la deuda soberana de la zona del euro, el exconseller de Economía Andreu Mas-Colell pidió la creación de unos hispabonos, una especie de deuda de las comunidades autónomas con el respaldo del Estado, ante las dificultades de las autonomías para emitir deuda en aquella coyuntura.
Finalmente, el Gobierno del PP acabó creando en 2012 el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) y otros mecanismos de provisión de liquidez, como el plan de pago a proveedores.
Cataluña se adhirió desde un primer momento a estos mecanismos para hacer frente a la delicada situación de sus finanzas, y las comunidades adheridas al FLA firmaron ejercicio tras ejercicio préstamos a diez años con el Estado para cubrir el déficit generado durante los años de la crisis y para poder atender así los servicios sociales básicos.
Esos préstamos se concedieron con los dos primeros años de carencia, pero pasado ese periodo las comunidades tenían que empezar a amortizar capital, y esa situación ha provocado que con los años la factura del FLA haya crecido ejercicio tras ejercicio como una bola de nieve.
Así pues, año tras año, la Generalitat y otras comunidades han recurrido a los préstamos del FLA para cubrir sus necesidades de liquidez, ya que, o bien tenían cerrada la financiación en los mercados financieros o bien resultaba mucho más cara que la habilitada por el FLA.
Cataluña pedirá prestados 8.481 millones en 2025
En los últimos años, la Generalitat ha barajado la posibilidad de volver a los mercados financieros con una emisión de deuda -la última opción que se barajó fue la emisión de un bono verde-, aprovechando que su calificación (rating) ha mejorado, pero esa emisión nunca ha acabado de llegar, en parte porque acudir al FLA también resulta menos costoso que emitir deuda.
La Generalitat pidió prestados inicialmente el año pasado 8.642 millones, aunque luego ha ampliado la solicitud hasta los 11.405 millones, para cubrir el exceso de déficit de 2023.
El dinero prestado por el FLA durante este año tuvo un interés medio del 3,159 %, según consta en la presentación a inversores de la Generalitat.
La previsión para 2025 es que la Generalitat pida prestados al FLA 8.481 millones de euros, de los que 8.048 millones servirán para cubrir vencimientos de deuda, principalmente del propio FLA, y 308 millones para cubrir el déficit del 0,1 % autorizado para 2025.
En los últimos años, la Generalitat ha tratado de diversificar sus fuentes de provisión de liquidez más allá del FLA, y por ello ha firmado varios préstamos a largo plazo con el Banco Europeo de Inversiones (BEI).