Cuerpo obvia el problema de la deuda y afirma que la economía española es «un ejemplo de éxito»
Destaca que la renta per cápita ha subido más en nuestro país que en Alemania desde el inicio de la guerra en Ucrania, sin decir que este fue uno de los países más golpeados por el conflicto y que seguimos a veinte puntos de la media europea
El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha vuelto a dar en el Spain Investors Day el clásico discurso triunfalista sobre la economía española en el que ya se prodigaba su predecesora en el cargo, Nadia Calviño. Entre otras cuestiones ha resaltado que la deuda sobre PIB ha descendido en veinte puntos desde el pico más alto de la pandemia, pero no ha dicho una palabra sobre que el volumen total de deuda pública española sigue creciendo y batiendo récords casi mes tras mes. Rebasamos con holgura los 1,6 billones de euros, 400.000 millones más que cuando Pedro Sánchez llegó al poder en mayo del año 2018.
A algunos analistas y al propio Gobierno no les preocupa. Piensan que el pago de la deuda está bien programado. Pero el hecho es que esa deuda habrá que abonarla, se crezca o no se crezca como la economía española lo está haciendo en la actualidad.
Cuerpo está convencido de que la economía española «es un ejemplo de éxito», y que fuera de nuestras fronteras nos miran con admiración. El hecho es que la economía española no crece disparando la productividad, como lo hacen el modelo estadounidense u otras economías con crecimiento sano, sino que lo hace gracias al aumento de la población (somos tres millones más de habitantes que hace tres años), el incremento brutal del gasto público (casi 180.000 millones más en los últimos cinco años) y las exportaciones. Como explicaba hace unos días en este periódico el catedrático Rafael Pampillón, la economía española no crece en calidad, sino en cantidad.
El ministro ha afirmado además que el poder adquisitivo ha mejorado en España, algo que dudan muchos ciudadanos al hacer la compra o intentar comprar o alquilar una vivienda. Para justificarlo ha indicado que la renta real per cápita española ha crecido un 6 % desde el inicio de la guerra de Ucrania, hace dos años, «más de lo que ha ocurrido en Alemania, Italia o Francia, y también más que la media de la OCDE», sin decir que el país germano fue uno de los más afectados por el conflicto. Tampoco ha señalado que nuestro PIB per cápita está veinte puntos por debajo del de la media europea, ni que el incremento de la inflación acumulada desde que gobierna Pedro Sánchez es del 20 %, lo cual hace dudar también de la mejora del poder adquisitivo.
El ministro ha resaltado también que por primera vez en décadas España está creando empleo sin reducir productividad. No ha mencionado que la productividad ha crecido un 10 % en los empleados españoles desde el inicio del milenio, un 20 % que la media de los países avanzados, según el reciente informe sobre salarios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Cuerpo piensa que la economía española está en un buen momento y que debe aprovechar «su ventana de oportunidad». Se ha mostrado satisfecho de que «por primera vez en nuestra historia económica» hayamos contribuido a mitigar el efecto sobre la economía de los shocks internacionales actuales en lugar de amplificarlos, de que el turismo se esté diversificando y de que los ingresos para nuestra economía de los servicios no turísticos rebasen a los del turismo, y de que la inversión extranjera esté explotando en España.
En el plano de las preocupaciones sobre la economía española, ha señalado como las principales la incertidumbre geopolítica y la vivienda. De las pensiones no ha hablado, quizá porque Elma Saiz ya sostuvo hace unos días que el sistema es perfectamente sostenible, algo de lo que dudan muchos expertos.