Daniel Lacalle: «La llegada de Trump es una buena noticia para la economía y las relaciones internacionales»
El economista piensa que los aranceles de Estados Unidos tienen lógica porque se los ponen en otros países, y afirma que no provocarán inflación
El economista Daniel Lacalle ha participado en la presentación de perspectivas de Tressis, la firma en la que es economista jefe, y ha hablado de la llegada de Donald Trump. En su opinión no aporta incertidumbre, sino todo lo contrario: «Es una buena noticia para el mercado, la economía y las relaciones internacionales», ha dicho.
Lacalle ha querido resaltar que la medida central de la legislatura de Trump no será en esta ocasión la bajada de impuestos que hizo en su anterior mandato, una bajada que Biden ha mantenido y con la que ha obtenido un récord de ingresos. En esta ocasión su acción principal vendrá por la reducción del gasto y la desregulación, que desbloqueará millones de dólares de inversión en energía, infraestructuras y telecomunicaciones.
Lacalle ha destacado que Biden mantuvo y aumentó los aranceles que impuso Obama, algo de lo que no se habla, y que por supuesto Trump también lo hará. Los utilizará como arma negociadora para equilibrar sus relaciones comerciales con otros países.
Si la negociación es fructífera, los bajará, como ha hecho con muchos países, pero con China no podrá hacerse de forma negociada, ha dicho; entre otras cosas, porque, mientras Trump ha revocado el cierre de TikTok, en China siguen sin poder operar empresas tecnológicas como Meta o Google.
En contra de la opinión generalizada, Lacalle afirma que «los aranceles nunca han causado inflación. No lo hicieron en 2016, ni con Bush ni con Obama. La inflación es causada por el aumento de gasto público y de la emisión de dinero», que es lo que habría que recortar, en su opinión. Ha indicado que China va a absorber los aranceles y de este modo «se reequilibrará el comercio global, ya que la Organización Mundial de Comercio ha abandonado esta misión».
Junto con el recordatorio de que Biden mantuvo su bajada de impuestos y los aranceles que impuso Obama, Lacalle ha querido resaltar también que Obama llevó a cabo la mayor deportación de inmigrantes ilegales de la historia de Estados Unidos: 2,7 millones. Es algo de lo que tampoco se habla.
Lacalle ha incidido en que «la inflación está viva y coleando», y solo podrá reducirse bajando el gasto público y la cantidad de dinero público que circula en el mercado. «Hay que acabar con aberraciones como los fondos Next Generation, los déficit gemelos y otros mecanismos artificiales» de creación de dinero, ha dicho.
Indica que «el problema para el crecimiento económico de Europa no es Trump: es la Unión Europea«, con su burocracia y su exceso de regulación, y ha señalado que la eurozona »no puede crecer haciendo daño a las empresas tecnológicas".
En un plano más global, ha resaltado el crecimiento de la India, que ya ha superado a Japón como tercera economía mundial y que «superará a China en PIB dentro de muy poco». Aun así, ha reconocido los problemas estructurales de India, que le afectarán de cara a su crecimiento, y ha comentado que la economía lleva años cerrándose y que su problema son los estímulos públicos. De todos modos, su economía seguirá creciendo.
De cara al futuro, ha señalado que «Alemania y Francia podrían pasar de no crecer nada a hacerlo mucho en un año si se quita la bota al sector industrial, manufacturero, etc. Europa surgió para salvar la agricultura, la ganadería y la industria y se la está cargando. Nadie ha votado el proyecto político por el que está apostando la Unión Europea. Las elecciones en Alemania pueden ser una buena respuesta en este sentido. Alemania no puede permitirse un estancamiento». En otro plano, indica cómo Italia ha salido adelante «con solo dejarla respirar».
Lacalle ha apuntado también como importante el mes de marzo. Podría despedirse a Jerome Powell y cambiar la política monetaria.
En cuanto a la deuda, ha lamentado cómo se pone el foco en su relación con el PIB y no en términos absolutos, en donde sigue creciendo, como se ve en España. Además, la subida de ingresos que permite la reducción de la ratio deuda/PIB está provocada por la inflación, que también hace mella en los bolsillos de los ciudadanos.