Los PCL (Proyectos Lingüísticos de Centro) actuales obligan a los alumnos a expresarse únicamente en catalán, tanto en clase como en otras actividades escolares
Educación
PP y Vox venden como un gran avance que los colegios de Baleares puedan dar dos asignaturas en español
El plan piloto de libre elección de lengua propuesto por el consejero de Educación contempla que los colegios ofrezcan que Matemáticas y Conocimiento del Medio se impartan en castellano
Los colegios de las Islas Baleares que se adhieran al plan piloto de elección de lengua propuesto por el Gobierno autonómico podrán ofrecer a partir del próximo curso dos asignaturas en español, Matemáticas y Conocimiento del Medio, entre cuarto y sexto de primaria.
En el curso 2025/2026, esta posibilidad, según contempla el Ejecutivo de Marga Prohens (PP), se extendería a los institutos, de manera que las familias de las islas podrían elegir una de las dos lenguas oficiales –castellano y catalán– en dos materias: Matemáticas y Geografía e Historia. Y además, otra asignatura del ámbito científico, resultante de la elección entre Biología y Geología, o Física y Química, o Tecnología, dependiendo de los itinerarios.
En cualquier caso, habría que garantizar siempre incluso dentro de este plan que el 50 % de las horas lectivas sean en catalán, una prebenda que ni tan siquiera ha calmado al nacionalismo, que critica el plan.
El nacionalismo no lo tolera
De hecho, el nacionalismo, que se agarra a la sinrazón de que dicho plan no respetaría ni la normativa educativa ni la normativa educativa vigente ni la autonomía de los centros, acudió a la cámara balear a mostrar su rechazo pese a las explicaciones voluntarias del consejero. Algunos aparecieron con camisetas verdes.
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Vera no aclaró cómo podrán elegir lengua los padres, asegurando que aún hay flecos que negociar con los representantes de la comunidad educativa. Sí se sabe que aquellos centros públicos que se adhieran a su hoja de ruta deberán hacerlo a través de sus respectivos consejos escolares y con el visto bueno de sus claustros de profesores. En el caso de los concertados, la decisión recaerá en manos de los propietarios del centro.
«Todos tendrán total y absoluta libertad de hacer lo que consideren», insistió Vera. Aun así, y pese a que el avance del castellano en la educación será tan pequeño –solo dos asignaturas–, la izquierda y el nacionalismo hablaron de segregación y de inmersión lingüística pero al contrario de lo que ellos defienden. PSOE y Mès aseguraron que lo que aquí se producía era un ataque contra el catalán.
Y es que PP y Vox, cuyo pacto hizo presidenta a Prohens, parecen querer vender dicho plan como un gran avance para el español. La diputada de Vox Manuela Cañadas ha mostrado su satisfacción por la medida:«Esperemos que el plan piloto sea acogido con gusto por las familias de Baleares. La lengua española ha sido tocada y hundida», ha manifestado.
Por el contrario, la diputada socialista Amanda Fernández, ha vaticinado que el proyecto «traerá conflictos y falta de cohesión en los centros escolares y en la sociedad. Traerá desigualdad entre centros, ya que algunos centros que no se adhieran al plan no recibirán dotaciones extra».
Por su parte, Maria Ramon, de Més, ha espetado que «el plan de segregación es la vergüenza infinita jamás vista. Separar es segregar. El PP ha aceptado el chantaje de Vox y sus políticas de odio».
